Para el próximo 1 de abril está pensado que Francisco Covarrubias asuma la rectoría de la Universidad Adolfo Ibáñez, casa de estudios en la cual hoy se desempeña como decano de la facultad de Artes Liberales. La decisión fue tomada por la junta directiva de la universidad luego de que el exministro de Educación Harald Bayer anunciara sorpresivamente que dejaría el cargo a fines de marzo.
Ingeniero comercial y magíster en Ciencia Política, Covarrubias es columnista habitual de El Mercurio y panelista en distintos programas de análisis político, entre ellos Mesa Central de Canal 13 y Tolerancia Cero de CNN Chile. También llegó a ser director del Diario Financiero y durante 14 años se ha desempeñado como profesor del curso «Historia del Pensamiento Económico» en la universidad de la familia Ibáñez.
Si bien Covarrubias es un hombre cercano a Chile Vamos -votó por Felipe Kast en las primarias de 2017 y por Sebastián Piñera en las presidenciales del mismo año-, su postura «liberal» lo ha llevado a defender causas que muchas veces van a contracorriente de este sector, como la legalización del aborto o la despenalización de las drogas duras y blandas.
«Llama la atención que un grupo importante, sobre todo en la derecha, desconfíe absolutamente del Estado para casi todo, salvo para los temas morales, donde lo transforman en una especie de guardián. Ahí hay una dicotomía súper grande (…) Una coalición política no puede transformarse en una coalición evangelizadora», afirmó en una entrevista a La Tercera el año 2017.
El daño al Gigante de Tarapacá
Un episodio menos conocido en la carrera de Francisco Covarrubias es la querella en su contra que presentó en 2019 el Consejo de Defensa del Estado, esto luego de que el decano dañara un milenario monumento arqueológico en la región de Tarapacá.
Durante la mañana del 20 de mayo de 2019, Covarrubias ascendió junto a otras nueve personas -entre ellas seis niños- al cerro Unita, en las cercanías de Iquique, para presenciar el geoglifo conocido como Gigante de Tarapacá o Gigante de Atacama. ¿El problema? Que al tratarse de una figura de más de mil años de antigüedad, se trataba de un lugar con protección especial cuyo acceso estaba restringido.
Según constató la fiscalía en ese entonces, Covarrubias y sus acompañantes fueron sorprendidos por las cámaras de seguridad desplazándose por los pies y piernas del Gigante de Tarapacá, por lo cual fueron trasladados hasta una comisaría, pasados a control de detención y luego formalizados por daño patrimonial.
El Consejo de Defensa del Estado también se sumó a esta querella y finalmente los involucrados debieron pagar una multa de diez millones de pesos cada uno. Cabe recalcar que otra de las imputadas del caso fue la esposa de Covarrubias, María del Carmen Aninat Urrejola, quien además se desempeña como secretaria académica en la Universidad Adolfo Ibáñez y es prima de Isabel Aninat Sahli, decana de la facultad de derecho de la misma casa de estudios.
El «palabreo» presidencial
Otro episodio que puso la atención sobre Francisco Covarrubias fue la ocasión en la que el presidente Gabriel Boric lo llamó «columnista menor» durante un acto público: a fines de diciembre del año pasado, el mandatario encabezó la inauguración de las obras de la Autopista Vespucio Oriente 2 (AVO 2), ocasión en que criticó a quienes minimizaban la recuperación de espacios públicos.
«El otro día un columnista menor despreciaba la importancia de haber recuperado una plaza en la comuna de Renca en donde antes había un narcomausoleo, y el alcalde Claudio Castro le respondía tratando de darle a entender -yo no sé si esa persona lo habrá entendido- la importancia que tiene para esos vecinos poder recuperar ese espacio», dijo el mandatario.
Lo anterior hacía referencia a una columna de opinión escrita por Francisco Covarrubias para El Mercurio en la que el ingeniero comercial describía la remodelación como «un balancín, un par de bancas y unas pocas petunias».
A pesar de estas polémicas, Francisco Covarrubias contó con la influencia y contactos necesarios para convertirse en el sucesor de Harald Bayer a la cabeza de la Universidad Adolfo Ibáñez: según consignó Ex-Ante, el decano mantiene una estrecha relación con los integrantes de la junta directiva, particularmente con el presidente, Pedro Ibáñez Santa María.
Se espera que su designación como rector se concrete el próximo 1 de abril.