Con la llegada de la temporada de sequías en Brasil, vuelven las amenazas de nuevos incendios forestales en la gigantesca selva amazónica brasileña, el pulmón natural más grande e importante para América Latina y el mundo, destacó este viernes una nota del portal Minuto NQN.
El Instituto Nacional de Investigación Espacial de Brasil (Inpe) publicó el jueves el primer balance mensual del inicio de esta temporada de siniestros en la Amazonía brasileña con el registro del mes de junio.
Este documento demuestra un nuevo récord histórico de quemas en el bosque amazónico del gigante latinoamericano. Por otra parte, para el grupo ecologista Greenpeace, la tala indiscriminada de árboles y la falta de medidas gubernamentales en pro de la protección y rehabilitación de la selva amazónica son las principales causas de la terrible deforestación en Brasil.
En el período del 2020 superó los peores récords de quemas registrados durante la última década. Sin embargo, los pronósticos para este 2021 son, incluso, mucho peores que los del año, sobre todo para agosto y septiembre, los meses históricamente más calurosos y secos.
Pronostican mayor riesgo de incendios en estados brasileños
Otra nota sobre el mismo documento del Inpe, de Telesur, alertó que en los próximos días podría aumentar el riesgo de incendios en los estados brasileños Mato Grosso y Mato Grosso do Sul.
Los satélites del Inpe muestran que al menos la mitad del territorio de dichos estados se encuentra en peligro alto o crítico por la posibilidad de los incendios, al tiempo que la asociación que agrupa a organizaciones de defensa del medio ambiente, Observatorio Climático de Brasil precisa que la situación del 2020 podría repetirse.
Según el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovaciones el índice Integrado de Sequía (IIS) del mes de mayo, al compararlo con el mes de abril, “indica la persistencia de condiciones de sequía en gran parte de Brasil, además de su intensificación principalmente en las regiones Norte y Nordeste y en los estados centrales – Sur del país”.
“Los estados de Mato Grosso do Sul, São Paulo y Mato Grosso se encuentran en un período climatológico de sequía, durante el cual no hay lluvias importantes”, refirió dicha entidad gubernamental.
Una nota emitida desde el Observatorio del Clima precisó que “la (falta de) estrategia presentada por el Gobierno mantiene la línea de fracaso adoptada para enfrentar los incendios y la deforestación en los últimos dos años”.
De igual manera, el Observatorio refiere que la región Centro-Sur del país también se enfrenta a la peor sequía en 91 años, y ha incidido en los embalses. “En mayo, las alertas de deforestación fueron las más altas jamás registradas en el mes, con 1.391 km 2 de devastación”, precisó la asociación.
Igual que en los estados brasileños Mato Grosso y Mato Grosso do Sul, la Amazonía presenta una difícil situación. El secretario ejecutivo del Observatorio del Clima, Marcio Astrini, expresó que “en la Amazonía, el fuego y la deforestación van de la mano.
«Para combatirlos es necesario mucho compromiso, acciones estratégicas y represión del crimen. Desafortunadamente, sabemos que el gobierno actual no hará nada de esto. Al contrario, Jair Bolsonaro es hoy el principal responsable de la creciente destrucción del bosque tropical más grande del planeta”, dijo el experto.
El 22 de junio de 2021 cuatro partidos políticos, el Partido Socialismo y Libertad (PSOL); Red Sostenibilidad (Rede); Partido Socialista Brasileño y Partido de los Trabajadores (PT) presentaron una demanda exigiendo que el gobierno federal y los gobiernos de los estados de Mato Grosso y Mato Grosso do Sul muestren en un plazo de 30 días un plan para prevenir incendios en el Pantanal.
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