Joan Turner y el Pueblo Mapuche: La historia del nacimiento de la Fundación Víctor Jara en el corazón del territorio pewenche

El último viaje de Víctor Jara y el nacimiento de la Fundación que impulsó Joan Turner

Este capítulo, impulsado por Joan Turner de Jara, cobra vida en Quinquen, un lugar que resonó con la pasión de Víctor por la cultura y la lucha del pueblo. Legalizada en 1993, la fundación teje un homenaje a la incansable búsqueda de Jara, estableciendo un faro cultural arraigado en las tierras pehuenche, donde la música y la resistencia convergen en un legado poderoso y poco explorado. Allí, en esas tierras, cuyos habitantes lograron la recuperación de históricas tierras, nació la Fundación.

Palabras de Joan Jara sobre principios y valores de la Fundación (Quinquén, territorio mapuche pewenche)

Un pedacito de su historia

Después de largos trámites, la Fundación Víctor Jara se legalizó en octubre de 1993. “Decidimos organizar la celebración de su nacimiento, no en Santiago, sino en el territorio pewenche, lugar donde Víctor realizó su último viaje de investigación en Chile. Tenía en mente una obra de larga envergadura, buscando relatos, historias y lugares sobre la centenaria lucha Pehuenche, y de los campesinos contra los latifundistas. Solo pudo comenzar su viaje, y no llegó a completar el trabajo. Como una manera de dar continuidad, simbólicamente, la comunidad pehuenche del valle de Quinquen nos acompañó con una rogativa, y mientras una lluvia de varios días amainaba y el sol apareció sobre la montaña, nació la Fundación Victor Jara”, destaca la Fundación.

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“Víctor, hijo de campesinos pobres, era un hombre que amaba la vida, y buscaba siempre el contenido de sus canciones, entre la gente más olvidada de este país. En las poblaciones urbanas, en las minas, entre los pescadores, las mujeres trabajadoras, entre los campesinos sin tierra, y los jóvenes sin trabajo, y para los niños (…) era su canción de cuna. Para su amiga Angelita Huenuman, tejedora Mapuche, su homenaje. Buscaba las raíces de su canto en la cultura propia de este continente, en la historia no escrita de la represión, y de la injusticia. En los anhelos más profundos de su pueblo. Así, en una labor de investigación para una obra musical, vino a esta región hace más de veinte años, para conocer la realidad de la vida e historia de sus lugareños. Estos son extractos de las notas de su viaje. Le quitaron la vida antes de que pudo componer la obra”, destaca la fundación Víctor Jara.

De esta forma, desde uno de los corazones del territorio pewenche, nace la fundación Víctor Jara y allí las palabras de Joan Jara se escuchaban con atención:  “Así le queremos entregar al Lonko, y a toda la comunidad, este recuerdo de un hombre que estaba cerca de ustedes, de vuestra lucha heroica por conseguir el derecho de vivir en la tierra de sus antepasados. Por conservar sus más hondas raíces, espirituales y culturales, para proteger el entorno de la naturaleza, el bosque nativo y el árbol que da vida, el pehuén”.

Agrega Joan: “Nuestra Fundación, sus objetivos, es ayudar y apoyar a todos los Victor Jaras que puedan existir ahora, entre ustedes en tantas partes de Chile que les cuesta sacar su voz, pero nuestro deseo es darle todo nuestro apoyo. Queremos realmente contribuir a un movimiento cultural cuyos valores no están en la competencia, no son valores de lucro, sino de la verdadera expresión del pueblo de este continente”.

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