Fotografía portada referencial: Radio Cooperativa
Cuando recién se regulaba la Convención Constitucional a través de la Ley N.º 21 200, publicada el 24 de diciembre de 2019, paralelamente, se formaba “El primer encuentro patriota”, con la tendencia clara de ir contra el proceso constituyente.
La Convención Constitucional (CC) fue el órgano constituyente de la República de Chile encargado de redactar una nueva Constitución Política de la República luego del plebiscito nacional realizado en octubre de 2020, y cuya propuesta será aprobada o rechazada mediante un referéndum el 4 de septiembre de 2022.
Su creación y regulación fueron efectuados a través de la Ley N.º 21 200, publicada el 24 de diciembre de 2019, que reformó la Constitución Política de la República para incluir el proceso de redacción de una nueva constitución.
Comenzó su funcionamiento el 4 de julio de 2021 y finalizó sus funciones el 4 de julio de 2022, con la entrega oficial del documento.
La campaña del rechazo
Un estudio de la Fundación Interpreta dado a conocer en abril de este 2022, analizó 7.389.067 menciones en redes sociales sobre la Convención Constitucional desde el inicio de la misma, determinó en qué momento la coordinación de ambas opciones comenzó a trabajar con el uso de redes sociales.
En esa línea, explicaron, que el 4 de julio del 2021 –jornada en donde se inauguró la Convención– ya había menciones sobre la opción «Rechazo de Salida». En concreto, ese día hubo 15.048 menciones con los hashtags ligados al Rechazo. Entre el 4 de julio de 2021 y el 12 de abril de 2022, se registraron un total de 176.242 menciones utilizando los hashtags del Apruebo de Salida, versus 1.304.022 menciones con los hashtags del Rechazo.
El estudio demostraba que previo a la instalación de la Convención Constitucional, existían grupos organizados contra el proceso constituyente y que instalaban masivamente la tendencia de rechazo al plebiscito de salida ¿Quiénes han estado detrás?
Encuentro de “patriotas”
Una acción planificada desde el año 2020 de grupos de extrema derecha, impulsó una operación/campaña con el único propósito de atacar el proceso constituyente que comenzó en julio del 2021, llamando la atención las acciones concertadas en el uso de las redes sociales con el fin de generar provocación, odio, denostaciones, tendencias y marcar pautas a los medios comerciales de difusión masiva, como parte de una estrategia que ha buscado debilitar, deteriorar, desgastar, deslegitimar, anular y, competir con mayor contundencia para la opción rechazo de salida frente a la propuesta de una nueva Constitución Política para el país que se somete a plebiscito este 4 de septiembre.
Uno de los encuentros claves que tuvo esta campaña, fue el realizado el 20 de diciembre del 2020 por medio del canal “La Voz de Rubistein” (Ricky Rubistein), que contó con la participación de algunos de los canales de comunicación de la extrema derecha, entre ellos: Gonzalo Townsend Pinochet, sobrino del dictador Pinochet y del canal “Verdad Histórica”; Sebastián Izquierdo del denominado “Capitalismo Revolucionario” e integrante del colectivo político “Fuerza Nacional”. También Alexis López, uno de los principales impulsores de “resistencia patriótica” a través del canal RST. Antonio Grandón del canal “Seguridad y Defensa”, entre otros.
Sin embargo, la instancia articuladora de la extrema derecha contra el proceso constituyente, reconocido por uno de sus impulsores, es la convocatoria que se hizo en abril del 2020 para iniciar el llamado “Movimiento Resistencia Patriota”, es decir a más de cinco meses del plebiscito del 25 de octubre del 2020 y a más de un año y dos meses de la entrada en funcionamiento de la Convención.
Uno de sus principales impulsores, fue Alexis López Tapia quien actualmente dirige el canal RST – Chile. Adquirió notoriedad en los medios de comunicación debido a que entre 1999 y 2010 lideró el movimiento neonazi «Patria Nueva Sociedad» y fue uno de los organizadores de un denominado «Congreso Nazi» a finales de los años 90.
López, caracterizó el denominado “estallido social en Chile” del 2019 como parte de una «Revolución molecular disipada», postura que popularizó al ser invitado a instancias conservadoras y militares de Colombia.
Encuentros “patriotas”
“Resistencia Patriota” es la primera parte de la campaña que comenzó a gestarse desde antes de la instalación de la Convención Constitucional. Su impulsor, Alexis López, señaló en una transmisión de RST del 23 de mayo del 2021, lo siguiente: “En abril del 2020 se hizo una convocatoria del Movimiento Resistencia Patriota y estamos terminando un año de ese llamado y se sumaron otras personas también, comunicadores, youtuber, generadores de contenidos, algunas figuras también, y a un año de la convocatoria el movimiento tiene unos dos mil inscritos y está formando grupos de trabajo a nivel local y nacional para el desafío que vamos a tener el próximo año que va a ser este plebiscito de salida de la constituyente respecto a la nueva constitución”.
Agregó en otro punto: “Como nosotros ya sabemos cómo va a salir esa nueva Constitución y no necesitamos ser ni pitonisos ni nada por el estilo, las cosas ya están escritas. Usted Póngase a leer, haga el análisis, trabaje, se lo están diciendo en la cara y si no se da cuenta, quienes somos nosotros para decírselo, pero ya lo sabemos”.
Sobre los inicios de articulación, López indicó: “Estamos formando hoy día, los grupos de trabajo del Comando del Rechazo, quiero decir con eso, que queremos adelantarnos a lo que viene, porque no vamos a esperar a nadie, que mañana o pasado o a un mes se diga Uyy viene el plebiscito hagamos algo, no esta vez, NO esta vez. Vamos a armar los comandos del rechazo, los grupos de trabajo, de los comandos del rechazo, a nivel nacional. Necesitamos a todos los patriotas que quieran participar, a todos, aquí nadie sobra, todos son absolutamente importantes, todos (…) Necesitamos gente que tome la solución del problema y hacer su trabajo para la solución del problema, que deje de estar preocupada y comience a estar ocupada”.
Luego de destacar que había algunos cientos ya formados, también hizo el siguiente llamado: “Usted se hace responsable o no se hace responsable, no le pida a otro lo que usted debe responsabilizarse y lo que tiene que responsabilizarse es que no terminen por quitarle a Chile, a sus hijos, a sus nietos y condenarnos a un País de esclavos para el futuro. Es tan simple como eso ¿Lo entienden o no lo entienden? Usted puede elegir por la libertad o puede elegir ser esclavo (…) le dedica parte de su día en tiempo a esto, no vive de esto (…) Hemos hecho hartas cosas y lo más importante que estamos haciendo es que estamos formando a la gente que va a ser la verdadera resistencia al proceso en curso, ahí va a estar la resistencia, porque están formados, porque entienden, porque saben y porque además pueden y están comprometidos de hacer lo que sean necesario para evitar que se nos imponga la esclavitud que se nos quiere imponer. Patria o caos”.
En efecto, en el denominado “Primer encuentro Patriota” por zoom y moderado por Ricky Rubistein, el miembro de Capitalismo Revolucionario y Fuerza Nacional, Sebastián Izquierdo, señalaba como principales ejes que debía tener los mensajes, sin hacer alusión directa a la constituyente: “Que todos nuestros mensajes sean de acción, que lleve al patriota que nos escuche, que lo lleve a una profunda indignación moral, que lo lleve a actuar en su vida cotidiana y entorno social y geográfico, imprimiendo nuestras consignas, en internet, en las calles, por la fuerza”.
La base principal de estos grupos con respecto a esos sentimientos primarios que se señalan, están relacionados con la defensa de: “La patria, la familia y la propiedad”.
El Movimiento de ultraderecha de “resistencia Patriótica”, se ha definido como: “Movimiento Político, Patriótico, no partidista. Cualquier Patriota se puede integrar sin tener que renunciar a sus propias ideas. Defenderá la Nación, la República y la Democracia. Su objetivo es «resistir la insurrección revolucionaria que estamos viviendo”, resaltan en su presentación.
Cabe consignar, que durante el proceso de funcionamiento de la Convención Constitucional, diversas denominaciones se instalaron marcando tendencias, entre ellas: Tiranía, neoinquisición, dictadura, autoritarismo, supremacistas, flojos, circo instituyente, incluyendo múltiples acciones de odio y múltiples hordas de racismo contra la Machi y exconstituyente mapuche, Francisca Linconao, como también a la ex presidenta de la Convención, Elisa Loncón, entre otras, buscando dirigir ataques a personas determinadas que pueden ser emblemáticas en el proceso.
Campaña del rechazo: de la ultraderecha al bloque neoliberal
Quienes han estado siempre detrás de la campaña contra la Convención Constitucional han sido grupos de ultra derecha pinochetista, ligados principalmente a organizaciones como “Resistencia Patriótica”, “Movimiento Social Patriota”, “Fuerza Nacional”, “Patriotas por Chile”, Republicanos, sumándose progresivamente de manera oficial Udi y Renovación Nacional, más, ciertos grupos desprendidos de la exconcertación, que en su mayoría han abrazado el neoliberalismo y que han sido parte de redes político-empresariales.
Hoy, la ultraderecha chilena, incluido a su excandidato presidencial José Antonio Kast, no aparecen en la primera línea de la campaña del rechazo, sí lo hacen los grupos descolgados de la exconcertación, junto a una tribuna activa de ciertas expresiones ciudadanas, ya que la campaña busca desmarcarse de partidos políticos y tendencias conservadoras, cuyo sector se encuentra unificado, por lo mismo, lo que se busca, es el quiebre de votos de la exconcertación o lo que han denominado “centro izquierda”, incluidos los denominados “Amarillos por Chile”.
Sobre los grupos como ‘Amarillos por Chile’, el ex constituyente, Mauricio Daza, en una entrevista a Radio Universidad de Chile, señalaba: “Son un simple instrumento. Acá los importantes son los grandes grupos económicos que concentran la riqueza en Chile y que se han beneficiado de un sistema de abusos consagrado y amparado por la Constitución del 80 y que se basa en el otorgamiento de derechos muy amplios para la explotación de recursos naturales no renovables de nuestro país”, recalcó Daza.
Hoy en el nuevo escenario de campaña, el manejo tendencioso anti propuesta constituyente, ya no tiene en primer discurso los vacíos mensajes de la ultraderecha sobre “sentimientos patriotas”, más bien, ha buscado manipular y tergiversar ciertos principios de la propuesta constitucional, entre ellos:
- Una constitución indigenista, que genera ciudadanos de primera categoría o privilegiados.
- Que los indígenas podrán quitarte tu casa o terrenos.
- Que los indígenas tienen derecho a veto sobre todas las cosas.
- Que no hay libertad de enseñanza ni de credo.
- Que no serán dueños de sus viviendas, porque no aparece el “propietario”.
- Que el estado no podrá soportar la carga financiera de la nueva institucionalidad.
- También sobre la pérdida de fondos de pensiones.
Todas estas acciones se enmarcan a profundizar el racismo estructural en el País y por otra, a la instalación del miedo y la inseguridad, campaña es similar al decálogo llamado “Manual de Steven Bannon”, que pauteó inicialmente la campaña populista de Trump y luego se expandió a todos los sectores de ultraderecha en el mundo.
Generalmente, este tipo de campañas pasan por actuar al margen de los medios tradicionales, a los que su receta recomienda criticar duramente como símbolo del establishment manipulador. De tal modo, sus campañas se centran solo en medios amigos que no hagan preguntas y en el manejo intensivo de redes sociales, de forma organizada y planificada.
Otro de los ingredientes de la receta Bannon muy seguido en Chile, es el desprecio por la verdad. A él (Steven Bannon), se le atribuye la idea de «los hechos alternativos» como eufemismo para las mentiras de toda la vida. Difundir datos falsos en redes sociales y en discursos sin preocuparse por su veracidad sino por la fuerza emocional que puedan transmitir es también su marca. El todo vale.
La crisis y el caos para este “estratega”, va acompañado del shok, el factor estrés y la manipulación de emociones y sentimientos primitivos. El sociólogo, primatólogo y antropólogo, Pablo Herreros, señala sobre su uso en el periodo de Trump: “el miedo, el asco y la ira es la zona más antigua de nuestro cerebro y se activa inconscientemente, sin que muchas veces podamos a ejercer control sobre ella (…) El Alfa Trump las activa conscientemente para manipular a los norteamericanos a través de narrativas irracionales. Sus mensajes advierten del peligro que acecha, dibujando un escenario apocalíptico de holocausto nuclear, lo que la vieja amígdala interpreta como si el león estuviera ya a pocos metros. Dispuesto a saltar para zamparse a todos los «gringos». Simple pero efectivo para movilizar a nuestro primate interior más irracional y vengativo”.
Otra de las estrategias que ha tenido este manual de ultraderecha, consiste en alimentar el miedo a lo desconocido y diferente. “Una tendencia de nuestra especie y otras cercanas. La ignorancia y el no saber provocan ansiedad y temores en la gente de los que Trump sacó buen partido. Aprovechando los sentimientos de confusión, se toman decisiones que en momentos de estabilidad jamás sucederían, como por ejemplo elegir un líder agresivo”.
La dictadura militar, su Constitución Política y la posterior administración del modelo neoliberal de los gobiernos de la concertación y la derecha, privilegió a un grupo de oligarcas, con fortunas en miles de millones de dólares, quienes han sido la cúspide de la pirámide del modelo económico en Chile, así como los mayores intervinientes del aparato público y redes políticas para mantener el régimen político y sus privilegios, incluyendo una serie de tratados de libres comercio que los han beneficiados en primer orden.
Para quienes plantean desde un “orden democrático” guiado por partidos políticos bajo el slogan de “rechazar para reformar”, los partidos de oposición hoy tienen al menos 67 diputados y 26 senadores, número suficiente para bloquear toda intención de transformación, independiente si el quorum es 4/7 como se discute hoy, con dos partidos políticos que han irrumpido más allá de la Udi y la Rn: El republicano y el Partido de la Gente.
Hoy, este legado estaría llegando a su fin el 4 de septiembre del 2022.