La crisis global y la cesantía en Chile

El 31 de mayo de 2010, El Mercurio de Valparaíso daba a conocer las cifras de desempleo, las cuales vienen a afirmar el retroceso de la cesantía en nuestra región, cuestión que parecería ser definitiva y que, de aquí para adelante, los problemas de la falta de trabajo en nuestra zona y el país se empezarían a terminar.

¡¡Mentira¡¡ y nada más alejado de la realidad son los datos usados por este medio para dejar un rato tranquilo al imaginario colectivo que sólo se conforma con leer los titulares.

Chile, al igual que todos los países con economías abiertas, depende del desarrollo y crecimiento de la economía de otros países, y esto tiene que ver con la posibilidad de las ventas de nuestras materias primas y mercancías elaboradas en mercados internacionales. Dichas ventas dependerán de la capacidad de consumo de los países con los cuales mantenemos relaciones comerciales activas y esa capacidad de consumo está ligada íntimamente, guste o no, al tema del empleo y la cantidad de consumidores con trabajo.

En ese contexto, los deseos de los vendedores de ilusiones se destrozan y contradicen con la realidad. La cesantía en  la Comunidad Europea ha alcanzado un 10,1% promedio, debido a la crisis mundial, y la situación en EEUU, con más de 6 millones de desocupados, es más que preocupante. Claramente estamos frente a un reflujo de la crisis mundial. Los datos de crecimiento del PIB en los países de Europa en particular no superan, en promedio, el 1%.

Sin ser economista, se puede aventurar que no se resolverá el tema de la cesantía en nuestro país, dado los datos anteriormente enunciados sobre los crecimientos proyectados.  Todo esfuerzo será vano para superar la hoy cesantía estructural, de Chile, si no se generan políticas económicas estratégicas que apunten a desarrollar las ventajas comparativas de nuestros vecinos y propias, para la producción de mercancías con valor agregado para su venta a otros continentes.

Así las cosas, hablar de un repunte en el empleo aparece como un despropósito, cuando el mismo 31 de abril del presente año se terminaron todos los contratos por temporada en el ámbito de la industria portuaria, al igual que en la agro industria y los obreros y obreras del campo (temporeros), de nuestra región.

Las bravuconadas de algunos ejecutivos sobre un aumento de un 35% en tonelaje transferido por el puerto de Valparaíso no es más que la consecuencia del atraso de la temporada hortofrutícola de nuestro país, pero en nada modificará la tendencia a la contracción del comercio internacional, que se empeora con la caída en crisis y depresión del viejo continente y su hijo menor EEUU.

De un -17,85% es la Variación de la Transferencia de Carga por el Puerto de Valparaíso

Hace pocos días, el Gerente de la Empresa Portuaria de Valparaíso (EPV) dio a conocer los datos promisorios del gran repunte de la trasferencia de carga por nuestro puerto. Entre otras cosas, planteó que nos acercábamos a cifras normales del comercio internacional por nuestro puerto. “Las cifras son muy positivas y nos acercan a los niveles de la pre-crisis internacional. Vemos una fuerte recuperación en la actividad portuaria para el 2010”, señaló.

Mostró cifras y los titulares de Mundo Marítimo y otros portales mostraron en los pies de páginas y primeras planas sendos titulares a propósito de lo mismo, con la característica foto, para resaltar el gestor de dicho notición. Mas al parecer, a los jóvenes periodistas se les olvidó investigar y  o simplemente sucumbieron frente a la exposición de la conferencia de prensa. Digo lo anterior porque las cifras del portal de EPV son un poco más completas y difieren en cuanto a la interpretación que cualquier mortal que maneja números podría dilucidar.

Más allá de los textos y entrevistas que se direccionan para quedarse en su puesto, no se puede pretender engañar a la opinión pública nacional, y menos a la internacional, pues eso daña nuestra credibilidad como país. Destacar el crecimiento de la trasferencia en Valparaíso para poco menos que decir que la crisis mundial se terminaba es, a lo menos, una cantinflada dado el silencio de los mismos datos en meses anteriores. Algunos ejemplos:

Según las cifras de EPV para el período 2008-2010 (que se adjuntan a este artículo), entre enero de 2008 y enero de 2010, la transferencia de carga se redujo considerablemente, registrándose una variación de -27,3%, en tanto, para el mes de febrero, esta variación fue de -25,1%. En marzo, por ser mes peak, la variación fue de -22,1% entre 2008 y 2009 y -17,2% entre 2008 y 2010. Finalmente, en abril de este año, por ser también mes de mayor actividad y debido al atraso de la temporada hortofrutícola, se registró un crecimiento de 35,1% con respecto al 2009, no obstante, este crecimiento no es suficiente, para recuperar el tonelaje de carga de abril del 2008 pues aun su variación es  -1,8%. Es decir, tomando los cuatros primeros meses de 2010, el promedio de baja con respecto al período previo al desencadenamiento de la crisis mundial es de -17,85% y en 2009 fue de -26,65%, cifra que debiese ser entregada a la opinión de industria portuaria y a los que hoy gobiernan para ver cómo exploramos otras alternativas comerciales. Y de paso resolvemos el problema de los trabajadores portuarios eventuales de Valparaíso y de lo puertos afectados del país que, al igual que el año anterior, sufrirán de la cesantía involuntaria que crea la necesidad, de respuestas inmediatas por parte del gobierno y las empresas del rubro.

Sin duda alguna, las cifras dan para mucho y su interpretación también, pero creo que no se puede seguir engañando a los ciudadanos que leemos un poco más que los titulares.

Por Jorge Bustos

Presidente Congemar