El pasado 9 de enero, el director de Control de la Municipalidad de Las Condes, Eduardo López, dio a conocer un informe que daba cuenta de una serie de irregularidades financieras al interior del Teatro Municipal de la comuna, entre las cuales se incluyen pagos a funcionarios de hasta $10 millones fuera de la norma fiscal.
El caso más emblemático es el de Constance Harvey, la exgerenta general del Teatro Municipal, cuyo sueldo por contrato estaba fijado en $5.354.613. Sin embargo, el informe señala que en septiembre de 2023 la corporación le depositó un total de $10.077.396 sin justificación alguna.
Si bien Harvey renunció a su cargo un par de días antes de revelarse el informe, finalmente tuvo que presentarse ante el Concejo Municipal de Las Condes para dar explicaciones respecto a las irregularidades detectadas durante su administración.
En dicha instancia, los representantes de la Corporación del Teatro Municipal señalaron que desde 2010 los estatutos facultan al gerente general a ejecutar medidas económicas como el pago de remuneraciones y bonos, entre los cuales se cuenta el bono anual al mismo gerente general.
A pesar de esto, desde la corporación reconocieron que a Harvey se le pagó dos veces un mismo bono, algo que calificaron como un «error» que ya fue subsanado, esto debido a que la exgerenta reintegró el dinero días antes de concretar su renuncia.
«Sin perjuicio de lo expuesto, de una revisión efectuada a la liquidación de septiembre de ese empleado (Harvey), se detectó que efectivamente hubo un error en el cálculo de los beneficios, se replicó erróneamente el bono a ser pagado», señalaron desde la corporación.
La defensa de Harvey
Constance Harvey, por su parte, se defendió recordando que la alcaldesa Daniela Peñaloza (UDI) le había comprometido un treceavo sueldo al momento de ofrecerle el cargo de gerenta general.
«Yo no recibí un monto mayor, recibí 2 sueldos líquidos, que fue el acuerdo que yo tuve para llegar a trabajar acá (…) Tuve entrevistas con ella (Peñaloza) y una directora. Y ahí se produjo esto de ‘yo pedí tanto, pero me están ofreciendo menos, y tengo que dejar casa y cosas’. Me señalan que hay un treceavo sueldo, yo no sabía que era bono», señaló.
«Y ese treceavo sueldo, yo digo ‘ya okay’, igual tenía ganas de trabajar acá. Después se intentó ver el anexo de contrato, me consta que la alcaldesa mandató hacer ese anexo, ya que se me había comprometido un pago», agregó.