La Fiscalía buscó condenar a Nicolás Bustamante a cinco años de presidio menor en su grado máximo. El ente persecutor acusó al excandidato a concejal por Doñihue de cometer el delito de tráfico de drogas.
Además de un cuestionado allanamiento del que fue víctima, la Fiscalía consiguió como pruebas hojas, tallos y tres troncos, además de una bolsa con flores de plantas de cannabis, que necesitaba para su tratar su depresión.
Cabe recordar que además de estar un mes en prisión preventiva, Bustamante debió pagar una insólita caución de $1.500.000
“En todo aspecto se me afectó: en el tema político, en mi tratamiento médico, como esposo, como candidato a concejal; me cortaron las alas y este proceso buscó eso mismo”, confesó Bustamante.
Ana María Gazmuri, diputada y fundadora de la Bancada Transversal Regulación por la Paz, expresó que “sorprende que la Fiscalía persevere en esta persecución, toda vez que tiene a la vista la nueva norma, promulgada el 23 de mayo del año pasado, en que queda claro que un paciente que tiene su receta médica no debe ser sometido a este tipo de procesos ya que no está cometiendo ningún delito”.
Finalmente, el TOP de Rancagua en un fallo dividido (2-1), dictó el sobreseimiento definitivo de la causa.
Por su parte, el defensor penal público Oscar Ortega, detalló que “tras casi tres años de proceso, el tribunal dictó un veredicto absolutorio, acogiendo la postura de la defensa al entender que la droga, encontrada en poder de mi representado, se marcaba dentro de un tratamiento médico, señalando al tribunal como elementos para adoptar la decisión que la propia legislación no determina la cantidad de droga, sino que se exige que sea proporcional al tratamiento establecido.”
Después del juicio Bustamante aclaro “sentirse muy tranquilo, porque por fin estoy absuelto de esta injusticia que no solo me hizo daño a mí, también a todo mi entorno”.