Este miércoles se dieron a conocer los primeros resultados del test de drogas al que se tuvieron que someter los diputados y diputadas del Congreso Nacional. De los 75 parlamentarios que se sometieron a la medida luego de un sorteo, ninguno arrojó positivo al consumo de estupefacientes.
La obligatoriedad del test de drogas fue incluida dentro del reglamento de la cámara baja en agosto pasado, esto a pesar de las críticas de distintos sectores políticos y organizaciones sociales que tildaron la norma como una iniciativa populista y estigmatizadora.
Una de las mayores críticas a la medida tiene que ver con el hecho de que el resultado debe hacerse público de manera obligatoria, pero sin indicar el tipo de droga consumida en caso de resultar positivo. Esto implica que tanto la marihuana como la cocaína, la heroína o el éxtasis tendrían el mismo tratamiento por parte de la comisión de ética de la cámara.
Debido a esto, tres diputados del primer grupo decidieron no realizarse el examen, por lo que deberán concurrir ante la comisión de ética de la Cámara Baja para dar explicaciones y podrían, eventualmente, recibir sanciones por incumplimiento del reglamento.
La norma además contempla que los congresistas que den positivo en el test de drogas deben permitir el acceso a sus cuentas bancarias para buscar rastros de vínculos con el narcotráfico.
Aún se espera que el segundo grupo de parlamentarios acuda a realizarse el test de pelo en el laboratorio de la Universidad de Chile.
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