Aunque es frustrante, todos sabemos que en las películas porno y en las románticas existe una gran dosis de fantasía que no tiene relación con la experiencia real que se vive en el sexo.
Un estudio realizado por Bijoux Indiscrets, una empresa desarrolladora de productos eróticos para mujeres, ha intentado medir el impacto que tiene la ficción en la vida y las espectativas de las personas.
El dato más llamativo es que todos los seres humanos, fingimos orgasmos de forma masiva, casi como un requisito o un plus.
Las mejores y más creativas para fingir son las mujeres, el 52,1% de ellas reconocen haber fingido un orgasmo. En tanto, el 8,4% de los hombres, también.
El motivo:
50% lo hicieron para satisfacer a la pareja y la otra mitad para que se acabara la situación en sí (los motivos son variados)
Lo más curioso del estudio es que presenta una solución tan original como divertida: La librería de orgasmos: La iniciativa #OrgasmosReales consiste en que cualquier persona grabe, de forma anónima, el sonido de su orgasmo real y lo comparta en las redes sociales.
El resultado es variado, excitante y muy instructivo. Los primeros orgasmos de esta librería han sido “donados” por voluntarias para reivindicar una mayor educación sexual y animar al resto de personas a compartir su experiencia (y algunos hombres, aunque todavía pocos, también se atreven).
A modo de ayudar en la iniciativa el medio Huffington Post ha subido a soundcloud, orgasmos femeninos y masculinos reales y nosotros los compartimos aquí contigo:
Así suenan las mujeres que no fingen
Así suenan los hombres que no fingen
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