Quién es Reinaldo Rosales, el operador político que tiene al FOSIS en pie de guerra

«¡Fuera Rosales!» era el grito que se escuchó durante la tarde del martes desde todos los rincones del Ministerio de Desarrollo Social y Familia. Los trabajadores se manifestaban con silbatos, pancartas y hasta batucadas en el patio interior del recinto mientras que, en el piso de arriba, sus dirigentes le entregaban una carta a las autoridades informando que el FOSIS iniciaba un paro nacional a partir de ese momento.

«Reinaldo Rosales, jefe de gabinete, desde su llegada junto al Director Nicolás Navarrete, ha buscado por todos los medios de convertir a nuestro servicio en una instancia pagadora de favores personales y/o políticos, lejana de su misión institucional, que con tantas luchas y sacrificios nos ha costado defender», dice el comunicado que se le entregó al ministro Jackson durante la jornada de ayer.

Reinaldo Rosales, abogado y militante del Partido por la Democracia, es también concejal de La Florida, cargo desde el cual ha ganado notoriedad debido a sus disputas con el alcalde Rodolfo Carter, a quien incluso denunció ante la Contraloría en abril pasado por «notable abandono de deberes» tras sus continuas apariciones en matinales.

Fue en abril de 2022 cuando Rosales aterrizó en el programa FOSIS como jefe de gabinete del director nacional, el economista Nicolás Navarrete. Desde su llegada, aseguran los manifestantes, el clima al interior del servicio se ha deteriorado de manera notoria. A Rosales lo acusan de intervenir continuamente en procesos técnicos para imponer sus criterios personales y políticos, además de privilegiar la opinión de sus asesores por sobre la de funcionarios de carrera del programa.

«Ha traído a personas de su confianza, amigos, compañeros y mucha gente del PPD. Son asesores pagados con sueldos millonarios que no cumplen labores estratégicas dentro del servicio y están permanentemente interviniendo en procedimientos, procesos y gestiones donde ya existen áreas técnicas para eso. Hay un permanente desconocimiento de las capacidades de funcionarios de carrera», señala a El Ciudadano Arlette Canelo, directora nacional de la Asociación Nacional de Funcionarios del FOSIS (ANFFOS).

En paralelo a su labor en el FOSIS y a su rol de concejal de La Florida, Rosales también tiene un tercer trabajo: desde hace 15 años es asesor jurídico del Ministerio de Defensa, donde figura como trabajador de planta. Cuando llegó al FOSIS, no lo hizo en calidad de funcionario del programa, ya que esto implicaría perder los beneficios que tienen los trabajadores de planta del Ministerio, sino que fue enviado en comisión de servicios desde dicha cartera.

Transcurridos unos meses, Rosales pidió un permiso sin goce de sueldo en el Ministerio para ser contratado a honorarios en el FOSIS. Dado que la ley fija en seis meses el máximo de tiempo que los funcionarios pueden estar sin goce de remuneraciones, Rosales deberá volver en julio a su rol de planta en el Ministerio de Defensa. Desde allí, dicen los trabajadores, volverá a ser enviado en comisión de servicios al FOSIS, y así irá rotando hasta el final del Gobierno.

«Rosales tiene guardada su planta y por eso está con estas modalidades truchas. No quiere ser funcionario en FOSIS porque perdería su calidad de planta y de paso su jubilación, que súper onerosa en su calidad de funcionario de las Fuerzas Armadas», señala Canelo.

Contactados por El Ciudadano, desde la central de FOSIS se limitaron a señalar que se encuentran atendiendo las demandas de los funcionarios una por una con el objetivo de «fortalecer y mejorar la gestión del servicio». Los trabajadores, por su parte, se encuentran en pleno proceso de negociación con las autoridades, pero aseguran que ya recibieron un portazo a la solicitud de remover a Rosales de su cargo, por lo que auguran un llamado a paro indefinido durante esta tarde.

«No queremos – y tampoco permitiremos – que nuestro servicio sea utilizado para intereses espurios ni seremos meros espectadores ante el creciente deterioro laboral al que nos están arrastrando las actuales autoridades del FOSIS», señalan desde ANFFOS.