Algunos dirigentes de RN comparten la idea de que la crisis que vive actualmente la UDI no puede paralizar a la oposición por completo, diagnóstico que se ha socializado a medida que pasan los días mediante distintas instancias internas del partido.
Los miembros creen que la crisis por la que están atravesando sus demás socios de coalición disminuyó considerablemente la agenda opositora y al mismo tiempo perjudicó la evaluación ciudadana por medio de las encuestas, además, lamentan que durante el verano haya perjudicado el trabajo del “nuevo referente” que lanzaron junto al Partido Regionalista Independiente (PRI) y a Evópoli a fines de enero, luego de firmar un acuerdo para la creación de una nueva coalición política.
Por esta razón, en Renovación Nacional decidieron activas desde fines de la semana pasada, un diseño comunicacional que busca liderar como un bloque opositor, pero de una manera autónoma, desmarcándose de la UDI. Dentro de la misma línea, últimamente se han agendado distintas actividades con los socios nuevos del PRI y de Evópoli, que apuntan a mantener aún más actividades durante las próximas semanas.
Cristian Monckeber, el presidente de RN, inauguró el consejo nacional del partido ante diversos dirigentes regionales y distritales, mediante la convicción de elevar permanentemente el estándar ético de la política, llevó a Monckeber a señalar que “la ciudadanía quiere gestos, decisiones y soluciones ahora”.
De esta forma, anunció diversas medidas que tomará la directiva para elevar los estándares de transparencia del partido, entre las que se encuentra una modificación en los estatutos que decrete que, en el caso de la formalización por ilícitos de un militante, que impliquen faltas a la probidad, su militancia será automáticamente congelada, y en el caso de existir una condena judicial, su expulsión será será efectiva después de poner a disposición del Tribunal Supremo sus antecedentes.
Monckeber anunció además que Renovación Nacional establecerá prohibiciones para asumir candidaturas a quienes sean condenados, declaró que se harán todos los esfuerzos para que no puedan presentarse a cargos de elección popular. Así también se dio a conocer que el organismo establecerá un mecanismo institucional frente a los casos de irregularidades, considerando también que las sanciones no quedará a discrecionalidad de la directiva que se encuentre activa.
Renovación Nacional se está viendo con un reforzamiento de su desmarque con respecto de la estrategia de la UDI, el partido que se vio envuelto en medio de una crisis que provocó el polémico caso Penta y afectó de manera perjudicial a la imagen de la oposición.
Diferentes dirigentes de RN han hecho el llamado público hacia la UDI, exigiendo una actitud más firme y castigadora frente a los casos de irregularidades en el financiamiento de la campaña de sus militantes. En el partido afirman que respetaban las decisiones de sus alianzas, pero declaran que su camino es distinto, además de recalcar que el gremialismo descartó la aplicación de sanciones a los afectados por el Caso Penta.
Cristian Monckeber se mostró agradecido frente a los militantes de su partido, ya que sin encontrarse bajo la una formalización, han dado un paso al costado en cuanto a instancias partidaria, no así, como sucedió con la suspensión de militancia al ex diputado Alberto Cardemil, investigado por el complejo caso.
En cuanto a todos los partidos que conforman la Nueva Mayoría, en RN señalan que deberían todos manifestar posturas institucionales claras y tajantes frente a sus diferentes militantes involucrados en casos de corrupción y robo, como SQM y Penta, afirman que la UDI no son los únicos que debieran tomar estas decisiones, claramente.
Finalmente el presidente del partido, criticó en varias ocasiones al empresariado por su rol frente a la mencionada crisis, declaró que se lavan las manos “como Poncio Pilato”, como si ellos no fueran parte del problema, además se refirió al Gobierno cuando dijo que sus respuestas han sido tardías y débiles, debido al mal liderazgo y decisión de la mandataria, Michelle Bachelet.