La cantante colombiana Shakira fue condenada a tres años de cárcel y al pago de una multa de más de siete millones de euros por el delito de fraude al fisco en España. Sin embargo, la artista no ingresará a prisión gracias a un acuerdo concretado a última hora entre su defensa y la fiscalía española.
Durante el juicio ante la Audiencia de Barcelona, Shakira reconoció haber defraudado con 14,5 millones de euros a Hacienda entre los años 2012 y 2014, todo esto a través de sociedades pantalla que utilizaba para desviar grandes sumas de dinero.
Finalmente, el tribunal acordó suspender el ingreso a prisión de la cantante a cambio del pago de una multa de 432.000 euros, lo que se suma a otra multa de siete millones que ya ha sido cursada. Además, Shakira debió devolver a la Agencia Tributaria los 14,5 millones de euros defraudados más otros tres millones por concepto de intereses.
De todas formas, el acuerdo supone una considerable rebaja de la multa original a la que se enfrentaba la cantante, la cual había sido fijada en 23,7 millones de euros. Finalmente, Shakira deberá pagar tan solo la mitad de dicho monto.
Tras el juicio, Shakira emitió un comunicado de prensa explicando sus razones para declararse culpable pese a considerarse inocente:
«Me sentía lista para enfrentarme a un juicio y defender mi inocencia. Mis abogados estaban convencidos de que teníamos un juicio ganador. Después de muchos años de lucha, he tomado esta decisión», explica la cantante.
«Tenía dos opciones, seguir peleando hasta el final, hipotecando mi tranquilidad y la de mis hijos, dejar de hacer canciones, álbumes y girar, sin poder disfrutar de mi carrera y las cosas que me gustan; o pactar, cerrar y dejar atrás este capítulo de mi vida mirando hacia adelante. He llegado a la conclusión de que no es triunfo ganar si el precio es que te roben tantos años de tu vida», sentenció.