¿Superar el extractivismo? Los desafíos del desarrollo endógeno

El modelo forestal fue pensado en los años 60 como la superación del monocultivo de extensión agrícola

¿Superar el extractivismo? Los desafíos del desarrollo endógeno

Autor: Seguel Alfredo

“El modelo forestal fue pensado en los años 60 como la superación del monocultivo de extensión agrícola. Por precio, el trigo no logró ser competitivo internacionalmente. Las forestales, desde el inicio fomentadas por el Estado, fueron pensadas como el segundo sueldo de Chile inclusive. Luego con la dictadura, el modelo se privatizó de manera espuria; la renta acumulada de las forestales destaca como la única alternativa, no obstante, bastante menor, a la gran minería. La oligarquía chilena, embobada con su renta, no innova como en otros países sí ocurrió, por ejemplo, Finlandia con Nokia, que pasó de ser una empresa forestal a una empresa de tecnología. Las forestales chilenas no innovaron”.

Vicente Painel Seguel

(Seremi de Economía. Región Araucanía)

Luz Vidal Huiriqueo, Subsecretaria de la Mujer, es un liderazgo a fragua… oriunda de Huichahue, emigró a la ciudad a laborar de trabajadora particular. Disconforme con la injusticia, se unió con sus hermanas y destacó como dirigente sindical -Sintracap-…Recientemente en su visita a Wallmapu, orientó a todos quienes hemos asumido cargos del Gobierno del Presidente Boric, nos dijo categórica: Deben pensar por qué, para qué, y cómo cumplirán el mandato de sus carteras…

Deng Xiaoping señaló: ” No importa de qué color sea el gato, si no, que cace ratones”. La impronta de este pragmatismo explica el desarrollo chino hasta la fecha. Es debatible si las metas de desarrollo humano se alcanzan, poniendo los recursos del Estado en la educación, como se supone que ocurrió en Finlandia, o en crecimiento económico, como se supone que ocurrió en China…Las antípodas son reduccionismos; las miradas dogmáticas tienden a reducir. En realidad, muchos siglos antes, Confucio preguntó: “¿a alguien le importa el color del gato si es que caza ratones?”. La fórmula de pregunta es deslumbrantemente clarificadora, porque si bien, lo más común es que a casi nadie le importe el color del gato, hay momentos, en que los que prefieren el color del gato antes que su efectividad, se vuelven mayoría; por eso la naturaleza de la economía es política… Solo el fanático separaría la economía de la política.

…Si tomásemos el PIB de las zonas de rezago en la región de la Araucania, nos daríamos cuenta de que apenas constituyen el 20%, del promedio nacional. Por supuesto, el problema es más complejo; por un lado, hay que aparejar la constancia de una distribución del ingreso muy desigual y ciertas consideraciones antropológico-económicas, como que las familias mapuche continúan con su circulación, y hay costumbres de solidaridad mecánica además en los territorios, lo cual relativiza quizás la pauperización en aspectos alimenticios, pero la cifra de apenas tener un 20% del PIB, da cuenta de los problemas mayúsculos… Se ha dicho que la región de la Araucanía es la más pobre de Chile, pero dentro de la misma hay acantilados socioeconómicos, propios del octavo mundo.

El modelo forestal fue pensado en los años 60 como la superación del monocultivo de extensión agrícola. Por precio, el trigo no logró ser competitivo internacionalmente. Las forestales, desde el inicio fomentadas por el Estado, fueron pensadas como el segundo sueldo de Chile inclusive. Luego con la dictadura, el modelo se privatizó de manera espuria; la renta acumulada de las forestales destaca como la única alternativa, no obstante, bastante menor, a la gran minería. La oligarquía chilena, embobada con su renta, no innova como en otros países sí ocurrió, por ejemplo, Finlandia con Nokia, que pasó de ser una empresa forestal a una empresa de tecnología. Las forestales chilenas no innovaron.

La mentalidad de renta fácil se reproduce culturalmente, pues no sólo, todos quieren dinero, como dirían “Los Prisioneros”; además, todos asocian dinero con desarrollo. En las zonas de rezago de la Araucania no hay dinero; empero, esta región es la que tiene más cooperativas del país; si lográsemos agregar valor al sector cooperativo, aportáramos con transformaciones administrativas, optimizáramos su comercialización, abriéramos poderes compradores, vertiéramos circuitos de comercio justo, y ahorráramos territorialmente con moneda social; seguramente contribuiríamos a dar un gran salto adelante desde la pauperización y el extractivismo, a la cuarta revolución industrial tecnológica y sustentable.

Efectivamente, es el mundo de la microempresa la que otorga el empleo en la región; agregar valor y consideración de asociatividad económica a todo este mundo, añadiría un concepto de área social de la economía y podríamos superar la pauperización. Mas, es necesario componentes determinantes para esta transformación. Hay que hacer cundir la confianza; esta es tarea de la gestión política que vuelve efectiva la ejecución presupuestaria; el Buen Vivir “Kume Mogen” será fruto de una revolución cultural permanente que ponga en valor los super-alimentos y actividades desapreciadas, más de altísimo valor como la visita y la amistad -turismo social y comunitario-, la pesca artesanal, el tejido llallin-wuitral y el arte muchas veces denominada artesanía…

La región es subsidiada desigualmente. Nunca se ha confiado en los mapuche con créditos blandos productivos, y siempre se ha subsidiado a la oligarquía local, que no chorrea. Hay que quebrar la mentalidad asistencialista. El año 1994, en una actividad, el colectivo de poetas “mapu ñuke” utilizó en su afiche el concepto de “kizunengun” (independencia). Un ngenpin, recientemente me dijo: “Creo que son los tiempos del kizun nengun rupu choyem,” o sea, el camino del independentismo económico, del desarrollo endógeno. Para ello, hay que dejar de usar “las redes sociales” como fuente para esparcir veneno o lucir narcisismo, y utilizarlas para asociarse, comercializar, como nuestros abuelos lo hacían en las ferias. Hay que sacudirse del racismo y tener amor propio, celebrar los triunfos de los pares, como las comunidades de las panteras negras y los triunfos atléticos del poder negro, cuando las luchas por los derechos civiles de los afroamericanos en Estados Unidos… Todo lo hemos hecho por amor; Ximena Maril Pilquimán, oriunda del lago Lleu lleu y dirigente de las temporeras en la región de O´higgins y además gestora de la villa mapuche en las faldas del cerro Patagua -destinado a recuperar sus pataguas- en la comuna de Pichidegua, es consejera nacional de Conadi, designada por el Gobierno de Gabriel Boric; ella manifiesta: “La tierra nos da todo porque es nuestra madre, y las madres dan todo por sus hijos”. Todo es por amor en definitiva; así como miles de jovencitas en el siglo XX, trabajaban puertas adentro en las grandes ciudades, y donaban todo su sueldo a las “reducciones”, para que sus hermanos pequeños sobrevivieran la condena de ser hijos de la tierra…Amor del yuyo que nutrió la carne, amor del guiñiu que abrigó el frío de la cordillera, amor del kollof que hizo ágil las articulaciones, amor del maqui que palpitó el corazón de los discriminados. Todo ha sido por amor. Va a tener que madurarse el amor propio, porque lo mapuche es bello… Saldremos adelante porque el amor siempre vencerá el miedo.


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