Los talibanes anunciaron su decisión de prohibir la anticoncepción en Afganistán, por lo que detuvieron la venta de anticonceptivos en dos de las principales ciudades del país y han amenazado a las parteras y farmacias.
Aunque el Ministerio de Salud Pública de los talibanes en Kabul y el representante de UNFPA en Afganistán no han emitido ninguna declaración oficial sobre el tema, los combatientes justifican esta nueva medida contra los derechos humanos de las mujeres alegando que su uso es una conspiración occidental para controlar a la población musulmana.
Trascendió que desde principios de este mes los talibanes ordenaron con armas a las farmacias limpiar sus estantes de todos los medicamentos y dispositivos anticonceptivos, y hacen revisiones regularmente para verificar el cumplimiento de la orden.
Una comadrona veterana, que no quiso ser nombrada, dijo para The Guardian que la habían amenazado varias veces y que un comandante talibán le prohibió “salir y promover el concepto occidental de controlar la población”.
Desde que llegaron al poder en agosto de 2021, los talibanes terminaron con la educación superior de las niñas, cerraron las universidades a las mujeres jóvenes, obligaron a las mujeres a dejar sus trabajos y restringieron su capacidad para salir de sus hogares. Restringir los anticonceptivos será un duro golpe en un país que ya tiene un sistema de salud frágil.
Una de cada 14 mujeres afganas muere por causas relacionadas con el embarazo y es uno de los países más peligrosos del mundo para dar a luz.
Los activistas pidieron a los talibanes que respeten los acuerdos internacionales que establecen el acceso universal a la atención de la salud sexual y reproductiva.