El vice primer ministro del gobierno de los talibanes (proscrito en Rusia como terrorista) Abdul Salam Hanafi, tuvo reunión en Kabul con el jefe del Programa Mundial de Alimentos de la ONU, David Beasley, comunicó el portavoz del movimiento talibán, Zabihullah Mujahid.
El jefe del programa de la ONU destacó que de la población total de Afganistán de 37 millones de personas, 23 millones están en una situación grave.
Indicó que la ONU está elaborando mecanismos para impedir una catástrofe humanitaria en el país.A su vez, el representante de los talibanes afirmó que Afganistán está dispuesto a cooperar con las agencias de la ONU, destacando que ve necesario su apoyo en ayuda humanitaria, recuperación y educación.
Afganistán se sumergió en el caos tras la caída del presidente Ashraf Ghani el pasado 15 de agosto. El movimiento talibán (*la organización está sujeta a las sanciones de la ONU por su actividad terrorista) tomó el poder poniendo fin a dos décadas de conflicto armado con el Gobierno que era apoyado por Estados Unidos y otros países de la OTAN.
A principios de septiembre los talibanes formaron un Gobierno interino en el que la mitad de sus miembros figuran en la lista de sancionados del Consejo de Seguridad de la ONU.
Cortesía de Sputnik
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