Terminar con el saco roto y construir la fuerza organizada del pueblo

Después de dos años de grandes movilizaciones aparece la sensación del saco roto

Terminar con el saco roto y construir la fuerza organizada del pueblo

Autor: Sebastian Saá

Después de dos años de grandes movilizaciones aparece la sensación del saco roto. Sin un proyecto popular unitario, y con un sector de la izquierda que abandona el campo popular para ser parte del proyecto de continuidad del modelo, queda de manifiesto la necesidad de sentarse a pensar y coordinar ideas entre muchos, con la cabeza y el corazón abierto ,despojándose de todo elemento de sectarismo, de soberbia y de sentirse dueño de la razón.

Lo cierto es que después de jornadas tan importantes como las jornadas de Aysén, no queda un saldo a favor. Por el contrario la mayoría de los dirigentes sumergidos en sus propios proyectos o cooptados por el sistema, salvo excepciones como Honorino Angulo.

De las grandes movilizaciones estudiantiles el activo que permanece organizado no alcanza a constituir el uno por mil de los que se movilizaron. No existen espacios donde se acumulen y se potencien las fuerzas sociales y políticas desarrolladas con los procesos de movilización y de lucha.

El proceso electoral, logró que al interior de los sectores populares más consecuentes se produjera una separación entre los que participaron y los que llamaron a abstenerse. Las acusaciones reciprocas se multiplicaron, cuando en realidad unos y otros apuntan a transformar la realidad ,solo que por caminos diferentes.

La izquierda más consecuente, transformada en un rosario de perlas dispersas, debe hacer un gran esfuerzo: Superar la mediocridad. Cada uno de nosotros, que formamos parte de ese conglomerado debemos empezar a realizar una revolución al interior de cada uno de nosotros. Dejar de verse el ombligo y levantar la mirada para ver al otro, al que no concuerda 100%.Terminar de ver sólo los defectos del otro y empezar a valorar su virtudes.

Los sectores dominantes amparados en un ciclo económico ascendente, se dan el lujo de seguir abusando con la mayoría de la población y continuar con sus fechorías que quedan todos los días al descubierto. La impunidad para robar y estafar les ha permitido a los sectores dueños de la riqueza, tener ganancias que triplican el gasto fiscal de toda la nación, con lo cual controlan toda la actividad social y política .

Los sectores de la clase política, que representan los intereses del gran capital, realizarán todas las maniobras necesarias para frenar el proceso ascendente de las movilizaciones y de la protesta social.: Junto al proceso de criminalización de la protesta social, fortalecerán sus acuerdos y sus alianzas políticas, implementarán pequeños cambios cosméticos de la institucionalidad, y se la jugarán por aquel candidato (a) que logre asegurarles una continuidad sin sobresaltos, para lo cual debe ser un candidato(a) que concite el, apoyo popular.

Cuando el MAP levanta la consigna de pasar de la abstención a la organización apunta correctamente a la tarea fundamental para el período: ganar para la causa popular a esa mayoría que se expresa fundamentalmente en la abstención, pero que todavía no representa una posición contra el sistema.

En la medida que se consolida un poder paralelo por parte de la burguesía, independiente del aparato burocrático del Estado, aparece como una necesidad inmediata, construir los espacios para los primeros embriones de Poder Popular, donde el pueblo construya un poder paralelo a la institucionalidad: Un Poder Comunitario.

En este contexto a las nacientes organizaciones como asambleas y coordinadoras sociales ,les cabe el rol fundamental de ser los portavoces de las demandas populares y de transformarse en los lugares de encuentro, donde se organice, planifique, las próximas movilizaciones y luchas en concordancia con las demandas mas sentidas por la mayoría del pueblo, además de concretar la solidaridad de clase con los hermanos que en cualquier parte del territorio nacional manifiesten su descontento y su rechazo al sistema.

En lo inmediato tenemos la movilizaciones de Freirina que requieren de todo nuestro apoyo. En Santiago tendremos movilizaciones ante los proyectos expansivos de los grandes consorcios de constructoras que ponen en peligro la integridad de barrios residenciales como Peñalolén, La Reina y otros. A lo largo del país se multiplicarán las manifestaciones de descontentos en defensa por el medio ambiente como han sido las movilizaciones en defensa del agua y oposición a la instalación de termoeléctricas en el Norte y represas en el Alto Maipo en la Región Metropolitana, lo que nos obliga conocer en detalle el mapa de los conflictos ambientales a lo largo de todo Chile.

La tarea de los sectores populares consecuentes debe apuntar a acrecentar la crisis del sistema institucional, afectado por la ilegitimidad de los alcaldes electos, quienes sólo contaron con el apoyo de una ínfima minoría, que en ningún caso superó el 14% de las personas con derecho a voto. Fortalecer el trabajo en la base social, agitar las demandas populares más sentidas ,multiplicar los niveles de movilización y de lucha, potenciar la organización popular, al margen de la institucionalidad, multiplicando y fortaleciendo la construcción de asambleas populares, lugares que deben transformarse en el espacio donde se congreguen los diferentes sectores del pueblo, donde en defensa de sus demandas inmediatas se construye la unidad por encima de las diferencias existentes.

A la movilización debemos fortalecer nuevas formas de acción que el pueblo empieza a ejercer, como el boicot contra los sectores mas abusadores del gran capital, al mismo tiempo ir potenciando diferentes formas de autogestión comunitaria.

Nuestra propuesta unitaria apunta a terminar con el archipiélago de organizaciones sociales (colectivos), cuya atomización se transforma en un obstáculo en la perspectiva de construir un sólido y fuerte movimiento popular.

Cuando se hace imperiosa la necesidad de prepararse para enfrentar nuevas tareas, de mayor alcance y envergadura ,aparece la necesidad de concretar un acuerdo unitario sustentado en el acuerdo ya expresado por el conjunto del movimiento social que ha demostrados su capacidad de luchar y movilizarse en forma masiva en un contexto de ofensiva popular, levantando una serie de demandas que ya conforman el esqueleto de un proyecto popular ,con un programa que no surge a partir de mentes expertas o de iluminados sino que esta presente en cada asamblea y en el conjunto de las movilizaciones y diversas formas de lucha que se extienden desde Arica hasta Punta Arenas.

Por Patricio Cid Palacios

Movimiento por la Asamblea del PuebloMAP

Inserto en El Ciudadano Nº138, segunda quincena diciembre 2012

***

Publicado en este medio por (no es el autor): 


Reels

Ver Más »
Busca en El Ciudadano