Los días 13 y 14 de octubre, China y ONU Mujeres copatrocinaron en Beijing la Reunión Global de Líderes sobre la Mujer, bajo el lema «Un futuro compartido: Un proceso nuevo y acelerando para el desarrollo integral de las mujeres». Este evento conmemoró solemnemente el 30.º aniversario de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer de Beijing de 1995; reafirmó los compromisos de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing; e hizo un llamado a los países para que asuman su responsabilidad histórica, practiquen el multilateralismo, salvaguarden el sistema internacional con las Naciones Unidas como núcleo y aceleren, con determinación firme, acciones enérgicas y coordinaciones solidarias el nuevo proceso de desarrollo integral de la mujer.
El presidente de China, Xi Jinping, asistió a la ceremonia de inauguración y pronunció un importante discurso, enfatizando que las mujeres desempeñan un papel fundamental en crear, promover y llevar adelante la civilización humana, y la comunidad internacional tiene la responsabilidad compartida de avanzar en su causa. Hizo un llamado a fomentar juntos un entorno propicio para el crecimiento y el desarrollo de la mujer, cultivar un enérgico impulso para el desarrollo de alta calidad de la causa femenina, desarrollar marcos de gobernanza para proteger sus derechos e intereses, escribir un nuevo capítulo en promover la cooperación global en favor de ellas, y anunció una serie de nuevas medidas de China para apoyar su desarrollo global:
En los próximos cinco años, China donará otros 10 millones de dólares a ONU Mujeres; asignará una cuota de 100 millones de dólares al Fondo de China para el Desarrollo Global y la Cooperación Sur-Sur en aras de implementar proyectos de cooperación para el desarrollo a favor de mujeres y niñas en colaboración con organizaciones internacionales; lanzará 1.000 programas de bienestar “pequeños y hermosos” con asistencia china que tienen a mujeres y niñas como beneficiarias prioritarias; invitará a 50.000 mujeres a China para programas de intercambio y capacitación; y establecerá el Centro Global para la Construcción de Capacidades de la Mujer, destinado a apoyar su desarrollo acelerado a nivel mundial.
La búsqueda de la igualdad de género y el desarrollo de la mujer son un gen inherente y una política básica de la República Popular China. En vísperas de la fundación de la nueva China en 1949, el «Programa Común», documento de naturaleza constitucional, estipuló claramente que «las mujeres tienen los mismos derechos que los hombres en la vida política, económica y social», lo que fue reafirmado posteriormente en la Constitución. Después de la fundación de la nueva China, las mujeres se liberaron, logrando «igual salario por igual trabajo» y desempeñando el papel de «sostener la mitad del cielo» en la construcción nacional. China ha integrado la igualdad de género en su sistema de gobernanza nacional, promulgó la «Ley de Protección de los Derechos e Intereses de la Mujer»; formuló e implementó sucesivamente tres planes decenales para el desarrollo de la mujer, estableciendo objetivos, medidas e indicadores de monitoreo en ocho áreas: salud, educación, economía, toma de decisiones y gestión, seguridad social, construcción familiar, medio ambiente y leyes.
En la China actual, la igualdad de género y el desarrollo de la mujer son una realidad. Ellas han escapado de la pobreza absoluta de manera integral y simultánea con los hombres; representan más del 40 % de la fuerza laboral, más de la mitad de los emprendedores de empresas de Internet, y más del 60 % de todos los medallistas en los últimos cuatro Juegos Olímpicos de Verano; las mujeres constituyen más del 50 % de las personas que reciben educación superior y el 37.7 % de los líderes empresariales; la proporción de mujeres entre los legisladores de la Asamblea Popular Nacional (APN) ha aumentado al 26.54 %, 10 puntos porcentuales más que hace treinta años, y las mujeres ocupan cargos importantes como consejeras de Estado, vicepresidentas del Comité Permanente de la APN y gobernadoras. Estas son interpretaciones contemporáneas del principio de que «las mujeres sostienen la mitad del cielo.
En esa línea, también se destaca que Chile ha avanzado activamente en la igualdad de género y el desarrollo femenino, estableciendo referentes con diversas acciones concretas, y ha promulgado la Política Exterior Feminista para apoyar un mayor papel de la mujer en el escenario internacional. Este año también marca el 55.º aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y Chile. Durante estos 55 años, nunca han faltado en la relación bilateral las contribuciones y la presencia femenina. Las mujeres de ambos países han tendido un puente de amistad a través del Pacífico con su sabiduría y resiliencia. En esta Conferencia Global, la expresidenta Michelle Bachelet y representantes del Ministerio de Relaciones Exteriores y del Ministerio de la Mujer de Chile estuvieron presentes, aportando la voz de Chile para acelerar la acción y fortalecer la solidaridad en pro de la igualdad de género y el progreso de la mujer.
En el futuro, se espera que las mujeres de todos los ámbitos de ambos países continúen desplegando su talento e inteligencia para promover una mayor comprensión, confianza y amistad entre Chile y China. Se espera que ambas partes fortalezcan la cooperación bilateral y multilateral en igualdad de género y empoderamiento femenino, promoviendo juntas los valores comunes de toda la humanidad de paz, desarrollo, equidad, justicia, democracia y libertad, y trabajando de la mano para construir una comunidad con un futuro compartido para la humanidad.
Por Niu Qingbao
Embajador en Chile de la República Popular China