En el encuentro de la J.League japonesa entre el Cerezo Osaka y el Vissel Kobe, que acabaría con 3-1, el conjunto anfitrión contó un con un mico recogepelotas, que saltó al campo con el baló bajo el brazo y que realizó el saque de honor.
Sin embargo, el mono no puede pasar la pelota con los pies, por lo que su entrenadora le indica que lo tome con las manos y se lo entregue al árbitro.
¿La polémica? El macaco dio unos toques de balón con las patas, complicado con la equipación del Cerezo aunque mostró una técnica bastante depurada para tratarse de un mono al que llevaba atado a una correa su cuidadora.