INC-3 en la Sede del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), Nairobi, Kenia
Los esfuerzos para crear un tratado histórico que ponga fin a la contaminación global por plásticos avanzaron han sido parte de las discusiones en Nairobi, capital de Kenia que reunió a diversos exponentes a nivel global, de 160 países.
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“La urgencia de abordar la contaminación por plásticos no puede ser subestimada”, señaló la semana pasada, Gustavo Adolfo Meza-Cuadra Velásquez, presidente del comité de negociación, en la sede del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente en Nairobi. «Para lograr un cambio a la escala requerida, debemos trabajar colectivamente», afirmó a agencias de prensa.
Sobre los pormenores de este importante encuentro global, comunicaciones de Alianza Basura Cero Chile, emitió el siguiente reporte de prensa.
“Las negociaciones de contaminación por plástico se alejan de la alta ambición y ceden a las presiones de países petroleros”
Entre el 13 y el 19 de noviembre se llevó a cabo el INC-3 en la Sede del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), en Nairobi, Kenia. Esta fue la tercera sesión del Comité Intergubernamental que redactará un tratado para detener la contaminación por plásticos, incluido el medio marino. A diferencia de las dos anteriores, que contemplaron cinco días de negociaciones, esta vez fueron siete intensas jornadas con plenarios, grupos de contacto y side events. Las negociaciones se centraron en la revisión y nuevas propuestas al “Borrador 0”, presentado por el PNUMA. Pese a ello, las altas ambiciones ambientales de algunos países están lejos de alcanzarse.
El evento contó con la participación de delegaciones de 160 países, organizaciones de la sociedad civil, lobistas de la industria, científicos, recicladores de base, representantes de pueblos indígenas y prensa. La delegación gubernamental de Chile estuvo representada por Macarena Quezada y Gonzalo Guaiquil del Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREL) y por Cristóbal Hernández del Ministerio de Medio Ambiente (MMA).
Más lobistas de la industria que delegados de 70 países juntos
Una de las informaciones divulgadas durante la semana que más llamó la atención tiene que ver con la gran cantidad de lobistas de la industria presentes en las negociaciones. De acuerdo con un análisis realizado por el Centro Internacional de Derecho Ambiental (CIEL, por sus siglas en inglés), se registraron 143 lobistas de la industria química y de combustibles fósiles.
Este número significó un aumento del 36% en el registro de lobistas vinculados a la industria productora de plásticos respecto al INC-2 en París, lo que refleja un claro conflicto de interés. Las organizaciones de la sociedad civil y los científicos han solicitado al PNUMA y a la secretaría del INC salvaguardar el proceso de negociación e implementar políticas al respecto, ya que los 143 representantes de empresas superan en número a las delegaciones de los 70 estados más pequeños presentes en esta sesión.
Delphine Levi, líder global de petroquímicos en CIEL, declaró que «Una y otra vez, hemos visto cómo la influencia de la industria ha bloqueado avances sustanciales en las negociaciones de tratados ambientales, incluso en espacios como la COP sobre el clima».
Unión Europea: Avances para detener el colonialismo de la basura
El comercio transfronterizo de residuos plásticos es una realidad: los países con mayores recursos envían basura plástica que no pueden gestionar a estados más pobres, donde difícilmente se pueden tratar de manera responsable. Sólo en 2022, la UE exportó más de un millón de toneladas de sus residuos plásticos. El 50% desembarcaron en países no pertenecientes a la OCDE como Malasia, Vietnam, Indonesia y Tailandia. En tanto Turquía fue el receptor del 33 por ciento de dichos residuos.
¿Cómo se entiende que los países desarrollados -del norte global-, teniendo la capacidad técnica y económica de abordar estos residuos, los envíen a países pobres o en vías de desarrollo con la excusa de empujar sus economías empobrecidas?
En plena semana de negociaciones del tratado de plásticos, se informó desde Bruselas que la Comisión Europea, el Parlamento Europeo y el Consejo de la UE llegaron a un acuerdo para que, en un plazo de dos años y medio, se detenga la exportación de estos residuos a países no pertenecientes a la OCDE. No olvidar que Chile y México pertenecen a este selecto grupo, lo que pone en alerta a las organizaciones ambientales de ambos países que monitorean estas prácticas perversas y destructivas en el mundo.
Asimismo, la Comisión debe evaluar en un plazo de dos años si los principales países importadores de la OCDE (Turquía, sobre todo) gestionan realmente los residuos plásticos de forma respetuosa con el medio ambiente y sin efectos significativos en el tratamiento nacional de residuos. De no ser así, la Comisión tiene que prohibir las exportaciones a esos estados.
Si bien lo ideal y lo que esperan las organizaciones sociales es que se detenga la exportación de residuos plásticos a todos los países, sin duda significa un avance importante para disminuir la nueva forma de colonialismo en el planeta: el de la basura.
Por el reconocimiento de recicladores y pueblos indígenas
Uno de los puntos a destacar fue el posicionamiento de recicladores de base y pueblos indígenas en la discusión. Los primeros, invisibilizados en las instancias diplomáticas hasta que fueron considerados por primera vez en UNEA 5.2 en marzo de 2022, donde se decretó la creación del INC para redactar el tratado.
El principal objetivo de las organizaciones es la reducción en la producción del material. Los recicladores se suman a este propósito. “Siempre nos preguntan qué pasaría si se reduce la cantidad de plástico, como que fuéramos a perder algo. La verdad es que están sumamente equivocados. Nosotros necesitamos que realmente haya un control y que las petroquímicas como también los estados se pronuncien frente a eso”, señala Soledad Mella, presidenta de la Asociación Nacional de los Recicladores de Chile (ANARCH).
Los Pueblos Indígenas también formaron parte del INC-3 y realizaron uno de los 12 side events que se llevaron a cabo durante la semana, con representación de América Latina, América del Norte, Asia y Oceanía. En este contexto, se compartieron algunos resultados de investigaciones del científico indígena, Rufino Verea, con relación al impacto de la contaminación plástica en ecosistemas, animales y en la salud de los Pueblos Indígenas.
Benito Calixto Guzmán, coordinador general de la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas (CAOI), manifestó que “el plástico nos está matando y está depredando nuestros ecosistemas más importantes. En la Amazonía con nuestros bosques, en el Ande con nuestros glaciares; está matando nuestros ríos, nuestras lagunas y manantiales. En consecuencia, nosotros estamos asistiendo a este evento para que se considere dentro del tratado los pensamientos que tienen los pueblos indígenas. Es decir, la de proteger y conservar a nuestra casa mayor, que es nuestra Pachamama”.
Delegación chilena abierta al diálogo
El desempeño de la delegación chilena fue positivo. Las intervenciones públicas siempre se alinearon con los países que solicitaban avanzar en la discusión, en contraposición con los estados productores de petróleo -liderados por Arabia Saudita, Rusia e Irán- que cuestionaron de principio a fin el Borrador 0.
La delegación chilena permite a miembros de la sociedad civil e industria registrarse como miembros de estado y siempre se mostró abierta al diálogo, sosteniendo reuniones constantes con miembros de las organizaciones, industria y científicos, haciendo hincapié en la necesidad de generar un trabajo intersesional entre este INC-3 y el INC-4, a realizarse en abril de 2024 en Ottawa, Canadá. Este trabajo intersesional es necesario con el fin de avanzar en las posturas regionales para llegar con mayor preparación a la siguiente ronda de negociaciones.
Desde la Alianza Basura Cero Chile y la coalición de organizaciones de la sociedad civil (GAIA, Break Free From Plastic, IPEN y CIEL) hay frustración con los objetivos alcanzados en este INC-3, dado que los países con intereses petroleros no suman esfuerzos comunes para avanzar en el tratado, sino más bien hay una intención de sabotearlo, y hasta el momento no hay mandato para un borrador cero, quedando solo 2 sesiones y con poco margen de tiempo. Desde Latinoamérica, la mayoría de los países busca apoyar el avance del proceso, en línea con la Coalición de Alta Ambición (HAC, por sus siglas en inglés), sin embargo, Brasil, Argentina y Cuba apoyan a los bloqueadores del proceso. Es por esta y muchas otras razones que es imperioso involucrarse en el proceso desde la sociedad civil, abrir debates, sumar esfuerzos y presionar a los gobiernos del mundo a alcanzar un tratado justo para las generaciones actuales y futuras.
De esta manera finalizó una intensa semana, con jornadas de más de 12 horas de negociaciones, con el fuerte lobby de las empresas y el trabajo de las organizaciones sociales, en conjunto con recicladores de base y pueblos indígenas, con el fin de generar un tratado que efectivamente cumpla con su propósito inicial: terminar con la contaminación por plásticos.