La cuarta noche del Festival de Viña del Mar 2024 presenció el debut de uno de los comediantes más prometedores del humor nacional: Lucho Miranda.
A través de sus chistes “oscuros”, como denominó a su humor negro, Lucho Miranda logró la mezcla perfecta ante un público que coincidía plenamente con su edad y sintonizó con él desde el primer minuto.
Además de hacer reír a la Quinta Vergara, Miranda intentó, según expresó “generar un poco de conciencia sobre la discapacidad y la inclusión”.
Bajo ese contexto, una de las frases más destacadas de su rutina fue “Yo no sufro discapacidad, yo vivo con discapacidad”.
Aquella sentencia generó una ola de reacciones en las redes sociales y el público presente, destacando la mentalidad y el cambio de paradigma con el que se para en los escenarios.
Al finalizar la jornada, Lucho Miranda se llevó todos los premios disponibles con la singular particularidad que ambas gaviotas eran “inclusivas” y contaban con un sujetador para que el humorista las pudiera levantar sin problemas.