No son pocas las personas que duermen mal y no siempre es culpa del cuerpo sino que del sentirse ansiosos o inseguros y una investigación realizada en los Estados Unidos cree haber encontrado una posible cura para el problema.
Si tienes un perro, gato y otra mascota quizá es momento de invitarla a compartir tu dormitorio, ya que un estudio realizado por la Clínica Mayodeterminó las personas descansan mejor al dormir con sus mascotas en la habitación.
Las ventajas de compartir el dormitorio con tu mascota según los expertos
Dormir mal no solo te deja cansado sino que perjudica tu rendimiento en el trabajo y el estudio durante el día, ya que te desconcentras fácilmente, estás irritable e incluso empeoran tus defensas, todas razones que hacen que la ciencia investigue constantemente formas de mejorar el sueño de las personas.
La unidad dedicada al estudio del sueño de la Clínica Mayo realizó una investigación acerca de qué variables hacían que las personas durmieran mejor, y para ello trabajaron con 150 participantes.
El 56% de las personas encuestadas compartía la cama o al menos el dormitorio con su gato o perro. Si bien uno de cada cinco individuos se quejó de los ruidos o molestias que le provocaban de noche, éste era un precio pequeño a pagar ante los beneficios. Incluso, un 41% de los participantes señaló que dormir con su mascota lo hacía sentir más relajado y seguro en las noches.
Los participantes del estudio describieron las sensaciones que les provocaban eldormir con su perro o gato, las que eran especialmente positivas en quienes eran solteros o no compartían el dormitorio con otros.
Sensaciones como felicidad, tranquilidad, estar abrigados y relajación estaban asociadas a tener a la mascota durmiendo en la cama con ellos. Las personas tendían a permitir a sus gatos bajo las cobijas, mientras que los dueños de perros no dormían tan cerca de ellos.
Los investigadores de la Clínica Mayo creen que estas sensaciones positivas se deben no solo a la seguridad que otorga la mascota sino también a la importancia que le daban a su perro o gato dentro de su familia, aprovechando la noche para pasar más tiempo con ellos.
Ya sabes si estás teniendo problemas para conciliar el sueño o te despiertas asustado en la noche quizá sea hora de abrir la puerta de tu dormitorio y dejar entrar a tu mascota aunque piénsalo bien si es que tienes un San Bernardo o a un gato que le gusta sentarse en tu cara.