En Camboya, la última población reproductiva mundial de ‘leopardos de Indochina’ está al borde de la extinción.
Aunque una vez se extendió a través de Indochina, un área que abarca Camboya, Laos y Vietnam, el leopardo de Indochina (o leopardo de Delacour) ha disminuido en un 72 por ciento durante un período de cinco años. Un estudio publicado en la revista Royal Society Open Science, reveló una de las concentraciones más bajas de leopardos jamás reportadas en Asia y es dramática: solo un ejemplar por cada 100 kilómetros cuadrados.
«Esta población representa el último rayo de esperanza para los leopardos en toda Laos, Camboya y Vietnam. Es una subespecie a punto de desaparecer», dijo el coautor del estudio, Dr. Jan Kamler. «Ya no podemos, como comunidad internacional, pasar por alto la conservación de este gato salvaje único», recalcó.
La noticia de la disminución de la población llega justo dos años después de que los investigadores anunciaran que el leopardo de Indochina perdió más del 95 por ciento de su alcance. Ahora, los investigadores estiman que hay poco más de 1.000 adultos reproductores en el sudeste asiático y esperan que este año la Unión Internacional por la Conservación de la Naturaleza (UICN) incluya a la subespecie como «en peligro crítico».
Los leopardos están amenazados por una serie de factores, casi todos relacionadas con los humanos. La caza ilegal para satisfacer una creciente demanda mundial de carne de animales salvajes, implica la existencia de cazadores furtivos que los matan indiscriminadamente.
A medida que las poblaciones de tigres continúan disminuyendo, los investigadores dicen que los cazadores furtivos también recurren a pieles y otras partes del cuerpo de los leopardos, para venderlas en el comercio ilegal de vida silvestre.
Por extraño que parezca, este descenso en los tigres está dando lugar a que los leopardos, altamente adaptables, llenen un vacío predatorio. Los científicos descubrieron que los leopardos se alimentan de banteng, una especie de bobino silvestre cinco veces más grande que el leopardo. El leopardo de Indochina es el único leopardo que ataca a una presa tan grande y se cree que ha cambiado sus objetivos de presa después de que las poblaciones locales de tigres se extinguieron en 2009.
Desde leopardos de las nieves hasta pumas, los grandes felinos de todos los continentes se enfrentan a grandes amenazas y el mundo por fin está empezando a prestarles atención.
«La historia es similar para todos los grandes felinos», dijo António Guterres, secretario general de la ONU. «Están bajo amenaza colectiva por la pérdida de hábitat, el cambio climático, la caza furtiva, el tráfico ilícito y el conflicto entre humanos y vida silvestre. Somos la causa de su declive, por lo que también podemos ser su salvación», afirmó.
Este año las Naciones Unidas han dedicado el 3 de marzo, Día Mundial de la Vida Silvestre, a los grandes felinos, bajo el lema «Grandes gatos: depredadores bajo amenaza».
«Mientras el mundo se reúne para celebrar el Día Mundial de la Vida Silvestre este sábado, debemos unirnos en acción, no solo con palabras, para frenar la epidemia de caza furtiva que enfrenta este y otros gatos grandes en todo el mundo», dijo Jan Kamler.
Por IFLScience