El hermoso y agraciado perrito que veremos a continuación se llama Lazarus. El solía vivir en un granero, rodeado de excremento, orina y mucha suciedad. Pero eso no era todo… él Se encontraba atrapado en su propio pelaje. Así es, tenía tanto pelo que realmente se le hacía muy difícil respirar. Esta situación llegó a este extremo, debido a que su dueño padece de una enfermedad terminal, lo cual le imposibilita mantener a su perrito en condiciones apropiadas.
Pero un buen día, Lazarus fue rescatado por dos personas, que se convirtieron en sus ángeles salvadores. Ellos sacaron al perro del granero y recortaron su pelo, lo cual hizo que se viera completamente diferente. Un vecino de esta propiedad, llamó a Jessica Kincheloe, para informarle de las condiciones en que vivía Lazarus, así que ella llegó en su auxilio.
Jessica lo sacó del granero y cortó todo el pelo sobrante, el cual tenía un peso de más de 10 kilos. Esto le estaba limitando la calidad de vida y la respiración al pobre Lazarus, quien se veía extraño e incómodo al principio, pero después pudo caminar y correr con libertad.
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“Se sentía bien al contacto humano, pero no era algo que le pareciera familiar. Afortunadamente, se sintió cómodo con nosotros de inmediato”. -Jessica Kincheloe a “The Dodo”.
Luego de esto, Lazarus fue trasladado a un refugio llamado “Big Fluffy Dog Rescue”. Su fundador, Jean Harrison, afirmó que el perrito aún se está acostumbrando, pero que todo marcha muy bien. Actualmente vive en una casa temporal, esperando a ser adoptado. A pesar de todo lo que vivió Lazarus, está mostrando una gran mejoría y que es un perro cariñoso y agradecido.