Los resultados de las autopsias a las 29 ballenas localizadas varadas en el Mar del Norte el pasado mes de enero, reveló que habrían ingerido diversos objetos de plástico de gran tamaño.
Entre las piezas halladas por los especialistas en los estómagos de los mamíferos se encuentran desde una red de pesca de 13 metros de largo a una pieza de plástico de 70 centímetros de un automóvil. Reseña un comunicado de prensa del Parque Nacional del Mar de Wadden en Schleswig-Holstein, Alemania.
Crece la inhumanidad
Los investigadores aseguran que aunque los restos de plásticos no son la causa directa de la muerte de los animales, si constituye un reflejo del desprecio de la humanidad por la vida marina.
Afirman, que todo apunta a que los 29 cetáceos murieron al adentrarse en aguas poco profundas. Añaden, que las ballenas varadas eran todas machos jóvenes entre los 10 y los 15 años, las necropsias revelaron que murieron de insuficiencia cardíaca.
El equipo cree que este grupo en particular nadó por error hasta el Mar del Norte, una zona menos profunda entre el Reino Unido y Noruega. Una vez allí, no pudieron soportar su propio peso corporal y sus órganos internos se colapsaron.
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