Tal vez deberíamos ser como los gorilas y crear canciones mientras comemos. Podría funcionar como una forma de rezo o de rompehielos en situaciones tensas.
De acuerdo con un científico alemán que ha registrado los sonidos que hacen los gorilas en el Congo, estos poderosos primates tararean y hasta cantan durante sus comidas, algo que también ha sido observado entre bonobos y chimpancés, dos de las especies más inteligentes.
Según publica New Scientist estas «pequeñas canciones» son más que vocalizaciones, «son tonos estables de baja frecuencia» que expresan satisfacción, algunos de los cuales son melódicos. Cada gorila tiene su propia voz, según explican, y canta diferentes canciones cada vez, como si las compusieran para la comida. De acuerdo con Ali Vella-Irving del Zoológico de Toronto, «si es su comida favorita cantan más alto».
Comúnmente son los machos espalda plateada los que más cantan. Los cantos parecen servir para dictar el ritmo de las actividades, algo así como decir «Ok, ahora estamos todos comiendo» y tal vez también y qué buena es la vida cuando se come. Hay algo sabio en todo esto, y es que la comida sabe más rica cuando se le canta.