Pocas cosas son tan ciertas como que cada día sale el sol o que a los gatos, les gustan las cajas de cartón. Puede que te hayas gastado parte de tu sueldo comprándoles un precioso rascador de cuatro pisos con dos casitas incluidas o todo un parque de juegos, no importa, tu amigo de cuatro patas siempre preferirá tu caja de zapatos o la propia caja de cartón en la que venía su juguete, antes que esos “trastos inservibles”. Nunca falla.
Hay quien conociendo la debilidad de los felinos por las cajas de cartón, les elaboran simpáticas construcciones con ventanas incluidas, cubículos que los gatos usarán entre 10 y 15 horas al día, y que mordisquearán hasta que queden inservibles. Es ley de vida gatuna, la obsesión por esconderse entre 4 paredes de cartón es algo digno de estudio que pasamos seguidamente a explicarte.
La pasión de los gatos por las cajas de cartón tiene explicación científica
El estudio es reciente, justo en este mismo año la revista “Applied Animal Behaviour Science” publicaba un trabajo llevado a cabo por la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Utrech, en Holanda, donde se intentó comprender esta fascinación de los felinos por la caja de cartón. ¿Sabes cuál fue su conclusión? Que los espacios pequeños como las cajas de cartón, son rincones de relajamiento para los gatos. Es aquí donde se refugian para descansar y para, según estos científicos, aliviar el estrés. Es por ello que para estos veterinarios sería muy adecuado que cuando adoptes un gatito, y lo lleves a casa, le ofrezcas una caja de cartón. Aquí encontrará seguridad y se sentirá menos nervioso.
Ahora bien, sabemos que existen otras muchas razones por las cuales, los gatos adoran las cajas de cartón. Está claro que son cubículos donde se relajan, pero además, numerosos biólogos y entendidos en la psicología felina, nos indican estos aspectos a tener en cuenta:
- A los gatos les encanta esconderse. No podemos olvidar que son depredadores, y el situarse en rinconcitos pequeños y quedar “camuflados”, les ofrece más posibilidad a la hora de cazar. Seguro que te habrá ocurrido en alguna ocasión, ir a tu armario a por una pieza de ropa y ver los ojos de tu gato acechándote desde la caja de zapatos para sorprenderte de improviso.¡Les encanta asustarte!
- Los gatos son curiosos por naturaleza. Así es, nunca falla. Acabas de comprar un electrodoméstico, le quitas en embalaje y, cuando te das cuenta tus gatos ya están ya husmeando en el interior de las cajas. Ocurre lo mismo cuando estás haciendo la maleta, si no te das cuenta y la cierras, corres el peligro de facturar a tu gato en ese viaje. ¡Les encanta saber todo lo que estás haciendo!
- Placer sensorial. A los gatos les gusta el sonido de las cajas, el olor y además, mordisquearlas y arañarlas. Se desahogan en ellas, son catárticas y relajantes para ellos, y no, el tamaño nunca importa. No pasa nada si apenas caben esa diminuta cajita de cartón, harán lo que sea por introducirse en ellas y mirarte con aire satisfecho.