La mayoría de los seres humanos con un instinto de supervivencia decente, hace un esfuerzo consciente por evitar a toda costa a los escorpiones, si te encuentras en la montaña, el desierto, o algún lugar donde te puedas topar con estos espeluznantes amigos. De hecho, tan sólo imaginar que pisas alguno durante la noche es… ¡No, gracias!
La teoría principal en este momento, se basa en que los escorpiones detectan la luz con todo su cuerpo. Sus ojos son extraordinariamente sensibles. Son capaces de utilizar la débil luz de la luna y las estrellas para encontrar su camino y cazar por la noche.
Estos pequeños arácnidos también disfrutan del refugio. Cuando se ponen en la luz solar directa, de modo instintivo, huyen a la sombra.
Un experimento probó esta teoría con la sobreexposición de los escorpiones a la luz UV, lo que drena su química UV-reflectante. Los que fueron sobreexpuestos pasaron más tiempo al aire libre y lejos de la sombra, que aquellos que fueron expuestos sólo con regularidad.
Así que si quieres asegurarte de que los escorpiones se mantengan alejados de ti, no exageres con la linterna UV.
Y yo que pensaba que los escorpiones no podían ser más espeluznantes. Por suerte, y lo que siempre tenemos que tener en cuenta, es que estos animales no pican, a menos que los molestes. Así que tenlo muy presente, y no te metas con ellos. ¿No son demasiado alucinantes?
F: Viral Nova