En el último tiempo hemos tenido que lamentar de manera frecuente noticias sobre animales sacrificados en zoológicos debido a la irresponsabilidad humana, en distintos lugares del mundo.
Recordemos que no hace mucho, en 2016, se vivió en el Zoológico Metropolitano de Santiago, la muerte de dos leones producto de un joven que ingresó a la jaula con la intención de ser devorado por ellos.
La noticia tuvo impacto mundial. La sociedad se dividió en la defensa de los animales en cautiverio, criticando el hecho mismo de su cautiverio y el exhibirlos bajo medidas de seguridad claramente no satisfactorias.
El caso del joven chileno fue impactante por la condición mental del joven y por poner en evidencia lo fácil que era traspasar las medidas de seguridad y acceder a la jaula de animales que, si bien están criados en cautiverio, son de naturaleza salvaje.
Nuevamente nos toca lamentar un hecho similar de sacrificio animal. Esta vez en el Zoológico Youngor de la ciudad de Ningbo, China, donde un hombre fue atacado por un tigre al burlar la seguridad del recinto e ingresar a la jaula de los felinos.
Según las informaciones que se manejan, el hombre, de 50 años, intentaba ingresar al zoológico sin pagar, para lo cual decidió saltar un muro de tres metros, cayendo finalmente dentro de la jaula de los tigres. El animal, al detectar al asustado hombre, lo arrastró a una zona de árboles con el fin de devorarlo.
Las labores de rescate se extendieron durante casi una hora, hasta que la policía decidió sacrificar al tigre. El hombre, producto de las graves heridas sufridas por la caída y por el ataque del animal, fue encontrado sin vida.
«Estos ataques de grandes felinos a humanos, que ocurren con triste frecuencia, muestran el profundo nivel de estrés, ansiedad y agitación que viven estos animales cada día de su vida», señala un comunicado de la agrupación de defensa animal Peta.
Ante este tipo de hechos cabe preguntarse si los zoológicos debieran seguir abiertos al público, o dedicarse a puertas cerradas a la conservación de ciertas especies ¿qué opinas?
Nosotros, como homenaje al tigre muerto, dejamos este bello poema del autor inglés William Blake:
El tigre
Tigre, tigre, que te enciendes en luz
por los bosques de la noche
¿qué mano inmortal, qué ojo
pudo idear tu terrible simetría?
¿En qué profundidades distantes,
en qué cielos ardió el fuego de tus ojos?
¿Con qué alas osó elevarse?
¿Qué mano osó tomar ese fuego?
¿Y qué hombro, y qué arte
pudo tejer la nervadura de tu corazón?
Y al comenzar los latidos de tu corazón,
¿qué mano terrible? ¿Qué terribles pies?
¿Qué martillo? ¿Qué cadena?
¿En qué horno se templó tu cerebro?
¿En qué yunque?
¿Qué tremendas garras osaron
sus mortales terrores dominar?
Cuando las estrellas arrojaron sus lanzas
y bañaron los cielos con sus lágrimas
¿sonrió al ver su obra?
¿Quien hizo al cordero fue quien te hizo?
Tigre, tigre, que te enciendes en luz,
por los bosques de la noche
¿qué mano inmortal, qué ojo
osó idear tu terrible simetría?
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