Lee Price, es una de las máximas representantes del hiperrealismo estadounidense, no sólo por u sorprendente dominio de la técnica si no también por el mensaje que intenta transmitir a través de sus obras, donde la inspiración suele ser ella misma en selfies que luego transforma en pinturas compartiendo espacios de intimidad que se vuelven reflejo de la realidad de muchas mujeres en un tema tabú: La verdadera relación con la comida de una mujer en la intimidad