El diseño se ha extendido en todos los campos y hacia todas direcciones. En el éter estético que alguna vez mencionó Yves Michaud, todo está plagado de belleza y en una necesidad de adorno y artisticidad como nunca antes se había visto. Aunque no sepamos cómo definir lo bello y esto se transforme conforme a distintas culturas –justamente por su falta de explicación–, sabemos que es un valor superior y entonces su exigencia se vuelve vital. El elemento estético se ha separado del arte, pero también de la naturaleza, así que toda producción capaz de transformar la vida, tanto en apariencia como en visibilidad, se ha convertido en una obligación.
La proliferación del tatuaje como práctica cultural y su aceptación social en nuestra era se debe, en gran parte, a esta necesidad imperante de llevar la existencia a los terrenos de la presentación democrática; es decir, de la vida que debe ser vivida, vista y juzgada estéticamente. En ese diseño que transgrede al cuerpo y lo posiciona en la perspectiva del ojo público, la significación que se profundiza en el tatuaje, más allá de las dos vertientes de su contenido –la personal y la del impacto en los demás–, se hace de suma importancia en la lectura de sus composiciones y lo que se dice a partir de ellos.
Independientes a su sentido íntimo, estos son los motivos principales que emanan de ciertos diseños que, en la actualidad, se consideran como los más famosos o recurrentes al momento de inyectar tinta en la piel.
Golondrinas:
En la tradición del American tattoo éstas significaban en el cuerpo del marinero que ya se había surcado 5 mil millas. También se asocia a estas aves con la idea del retorno.
Anclas:
Representación de estabilidad y seguridad.
Tiburones:
Diseño heredado también del estilo clásico americano; significa coraje y voluntad.
Dragones:
Muestran exotismo y mística en el cuerpo de quien los porta.
Cráneos:
De acuerdo con la cultura que vio nacer al tatuaje en la vieja América, estos representan una consciencia de muerte, valentía y mercenarismo
Militares:
Los motivos bélicos en el cuerpo siempre hablan de lealtad, empuje y un juramento.
Serpientes:
Representan potencia y poder.
Panteras:
Totems de proeza y virilidad con un toque de delicadeza.
Águilas
Además de honor, valor e inteligencia, estos animales suelen representar a Norte América en la piel.
Pin up:
Excelencia y perfección en siluetas de astucia.Sensualidad
Barcos:
Representan aventura y determinación.
Corazones:
Amor, mientras más clásicos y pintorescos, mejores para esa acepción.
Estrellas náuticas:
Por excelencia están relacionadas a la Estrella del Norte, por lo tanto, a la idea del hogar.
Mariposas:
Transformación y progreso. Además de cierto grado de feminidad.
Om:
Este símbolo, que también se relaciona a un sonido, significa el comienzo y el fin de la vida.
Malin:
Este símbolo originario de la cultura sueca es una mezcla entre un infinito y una flecha que significa progresos complicados.
Enso:
Es un círculo incompleto que remite al universo y significa fuerza.
Fases lunares:
Cualquiera que se elija, da un mensaje de cambios, transmutación . Ensoñación, intuición.
Soles:
Potencia vital, energía, luz.
Plumas:
Sus significados varían entre lo positivo y lo negativo; puede ser tanto muerte y pérdida, como nacimiento y suerte.
Rosas:
Quizá uno de los clichés más obvios en la imagen, la rosa suele representar los conceptos del amor, la pasión, la belleza y la fuerza natural.
Cerezos:
Traídos de la tradición asiática, estos árboles figuran la vieja vida en el paso a una nueva y a la belleza que conlleva el ciclo de la existencia
Tigres:
También característicos de la tradición clásica, estos feroces felinos son signo de realeza, falta de miedo y rabia.
Sirenas:
Un diseño eterno en el arte del tatuaje. Una mezcla de deseos en torno a la sensualidad, la lujuria y el peligro.
Atrapasueños:
Obedeciendo a sus funciones en las creencias de muchas culturas, estos objetos son señal de buena fortuna, felicidad y protección.