John Koenig, un diseñador gráfico que actualmente vive en Minnesota, pensó lo mismo que tú en 2009 y decidió crear nombres en un idioma ficticio para referirse a estos sentimientos. Tituló su proyecto como «Dictionary of obscure sorrows», el que podría traducirse como «Diccionario de las oscuras melancolías» y decidió inventar una etimología especial, usando una docena de lenguajes ya conocidos, para construir palabras nuevas que eventualmente pudiesen rellenar estos hoyos en la experiencia. Les dejamos una selección ciudadana de tres videos encontrados en español con subtítulos.
El primero es «Sonder», palabra usada según el autor para: «Darte cuenta de que cualquier transeúnte tiene una vida tan intensa y compleja como la tuya –con sus propias ambiciones, amigos, rutinas, preocupaciones y heredadas locuras– una historia épica que prosigue invisible a tu alrededor como un hormiguero repleto, bajo tierra, con elaborados pasadizos a otras miles de vidas que nunca sabrás que existieron, en las que incluso puedes aparecer, a lo mejor, una vez, como un extra en segundo plano, dándole un sorbo a un café , como un borrón de luz atravesando la autopista, como una ventana iluminada al anochecer»
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