Valeria Marmentini, canta y camina junto a Camila Moreno alrededor de una fuente en el Patio Bellavista. Es un antiguo recuerdo que no he borrado. Pero ahora ella es AirelavaleriA, un proyecto, que según explica “tuve siempre en paralelo y desde antes de empezar a tocar con la Cami. Son mis composiciones. Desde muy niña que hago esto, aunque antes no sabía escribir música, y muchas cosas se me olvidaban. Siempre fue un proceso un poco secreto, muy íntimo, y luego estudiando música empecé de a poco a mostrar composiciones, casi todas dirigidas a este proyecto”.
Aparte de la composición, explica, “caché que tenía que hacer realidad la necesidad de cantar sobre un escenario, que era algo muy desconocido, nunca había tenido una banda hasta «Inmanencia», hace tres años, que fue un sexteto de mujeres cantantes que componíamos”. Y luego vino la etapa con Camila Moreno, donde dice que no se acuerda “si ella me pidió o me ofrecí a tocar en su proyecto, lo que si sé es que me gustaban mucho sus canciones cuando comencé, me conmovían mucho, también su canto”. A fines de 2008, casi «almismotiempo» de empezar a tocar con Moreno llamó a los músicos con lo que quería tocar sus composiciones, y así se formaron «Los Ricos Suaves» para empezar a tocar en vivo todas estas músicas e ideas que tenía semiguardadas.
Sobre su sonoridad, Valeria señala que su trabajo se aleja de lo que hacía como corista de Moreno, ya que son diferentes “porque somos personas con identidades diferentes. Historia, procesos, personalidad, algunas certezas y dudas diferentes, algunos gustos también. A ambas nos importa ser honestas con la identidad personal, por sobre cualquier «estilo». Es algo que tenemos en común pero que es lo que nos diferencia, la verdad personal.
Justo en estos días ha estado en el proceso, de grabación de su primer disco, que define como “una sumatoria de varias cosas que he tenido necesidad de expresar en palabras y en sonido a lo largo de mi vida. Es como una especie de vómito recopilatorio. Tiene una gran diversidad de sonoridades. Muchos instrumentos: batería piano, guitarra, bajo, hasta bronces, cuerdas, objetos cotidianos y juguetes como instrumentos para algunas canciones, y muchos juegos de voces. Hartas soledades, un poquillo de humor, una que otra rabia, contemplación y acción”.
Estará hecho con mucha vocación y trabajo, añade, ya que “por mi parte todo nacido básicamente desde el instinto musical, la necesidad sonora. No quise hacer este disco sabiendo o siguiendo convenciones musicales o sonoras que me han enseñado -y que aún no me aprendo. Es muy libre. Soy bastante inculta en convenciones básicas de música popular, y eso se puede usar para la libertad, en un primer momento. Es un disco bastante desprejuiciado y exploratorio, pero básicamente de canciones… la música popular presente”.
En un trabajo que ha abordado junto a Los Ricos Suaves, que “son las personas que elegí para tocar conmigo porque no son sólo músicos excepcionales en todo sentido, sino personas super interesantes, todos. Se componen de Rodrigo Muñoz, Samuel Ponce e Iván González”. Este es el proceso actual de AirelavaleriA y Los Ricos Suaves, en algo explica “donde quiero que cada vez más que se afirmé el híbrido entre un trabajo de banda cohesionada, la improvisación de las tocatas y un trabajo de compositor arreglador”.
Jordi Berenguer
Onda Corta
El Ciudadano