¿Qué pasaría si la Mona Lisa se cansara de su viejo y aburrido vestido y de la misma seria pose de toda la vida? Probablemente ni siquiera te lo imaginas. Pero el diseñador gráfico japonés Shusaku Takaoka nos ha dado la respuesta a esta incógnita, y lo hizo con mucho ingenio.
Takaoka es un experto en transformar la historia en una expresión hipster. Sus obras trasladan de forma divertida algunos de los rostros más reconocidos del arte clásico en habitantes modernos de la ciudad; por si fuera poco, también los transformó en estrellas de cine, portadas de revista e incluso baristas.