Comerciantes del mercado de artesanías del Parían lamentaron tener pocas ventas de “mulitas” y “panzones” durante las primeras horas del jueves de Corpus Christi.
Afirmaron que debido a la contingencia sanitaria por el covid-19, menos creyentes católicos se dieron cita a esta zona, afectando considerablemente sus ventas.
Es el caso de María Victoria, quien se trasladó desde el municipio de Amozoc para llegar cerca de las 9:00 horas y poder vender sus “mulitas”, artesanías a las que les dedicó cerca de dos meses.
“La verdad, sí han estado muy bajas las ventas, yo creo que es por lo mismo de la pandemia, todavía hay poca gente, pero ahorita no nos podemos quejar, porque aunque sea poco, hemos vendido”, mencionó.
Por su parte, Gerardo, quien tiene más de 40 años fabricando con sus manos figuritas de los “panzones” explicó que, a diferencia a otros años, en esta ocasión poca gente se acudió a comprar estas artesanías.
“Ahorita seguimos muy bajos en las ventas, está todo muy flojo, lo que nosotros esperamos es que más al rato la gente se acerque y nos compre, pero sí hay poca gente, no es como antes de la pandemia”, mencionó.
Tradición de años
Por otra parte, algunos poblanos intentan mantener con vida esta tradición para heredarla a las nuevas generaciones, como Eleonora quien acudía desde que era niña con sus abuelos.
Ahora, años después, trata de compartir esa tradición con sus nietos, a quienes les trató de explicar la importancia de esta tradición católica.
“Esta ya es una tradición de años, desde nuestros abuelos, yo venía cada año con ellos, todos los años venía yo, y ahorita que ya se puede salir de nuevo, quiero que mis nietos aprendan la relevancia de esta tradición”, mencionó.
Afirmó que la tradición de las “mulitas” y “panzones”, surgió como una burla hacia la gente de dinero por parte de las clases más humildes del estado.
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Fotos: Agencia Enfoque