Mañana se lanzará la película The Interview (La Entrevista) en 200 cines independientes estadounidenses. La película ha provocado una disputa entre EEUU y Corea del Norte, la producción cinematográfica cuenta una historia sobre el asesinato del líder del país asiático, Kim Jong-Un, y como la red del estudio cinematográfico fue hackeada por un programa de sabotaje.
Las noticias vinieron tras alegatos contra Corea del Norte sobre un ataque cibernético dirigido a la empresa productora Sony Pictures. Las amenazas causaron que la compañía dejara la decisión sobre el lanzamiento de la película en los cines, mientras que varios rechazaron a mostrarla. Muchos criticaron a Sony por su decisión, la cual resultó en la suspensión del estreno, incluso el presidente de EEUU, Barack Obama expresó que le deberían haber consultado primero.
Obama también expresó que su país no será censurado por una dictadura, también señaló que la película no se puede considerar un acto de guerra, como reclaman las autoridades de Corea del Norte.
“Fue un acto de vandalismo cibernético que fue muy costoso y caro. Lo tomamos muy en serio. Vamos a responder de forma proporcional,” señaló Obama en una entrevista con el canal internacional, CNN.
El lunes el país sufrió un corte en las redes de internet, alegatos se dirigieron contra EEUU, el país no rechazó ni confirmó su responsabilidad e involucramiento en la agresión. Sin embargo, el presidente Barack Obama ha expresado anteriormente que su país responderá a las hostilidades en la red.
El ciberataque a Sony se realizó justo antes del lanzamiento de la comedia, la cual se trata sobre David Skylark y el productor Aaron Rapoport quienes manejan el espectáculo sensacionalista de celebridades “Skylark Tonight”. Ellos planean una entrevista con un sorprendente fan: el dictador norcoreano Kim Jong-un, luego es reclutado por la CIA para convertir su viaje a Pyongyang en una misión de asesinato.
Se identificó a un grupo de norcoreanos como culpables de la agresión y al mismo tiempo Corea del Norte amenazó a la empresa con un acto de venganza. Hace unos días, el FBI confirmó el vínculo entre el conjunto de hackers autodenominado Guardianes de la Paz y el régimen de Corea del Norte. La agencia señaló que las autoridades norcoreanas son responsables del ataque.
Información sobre sueldos, datos personales, presupuestos de películas y más de 12,000 mensajes de la bandeja de entrada del correo electrónico de la co-presidenta de la empresa fueron filtrados, reporta la revista THR.
Sandra Segall
El Ciudadano
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