Entre los encargados de la realización está el responsable de «Narcos» y un productor experto en documentales seriados
La industria farmacéutica ha sido responsable por dañar la salud de millones de personas en todo el mundo. Muchas de las estrategias empleadas por trabajadores del sector, con el fin de obtener ganancias incalculables, son deliberadamente ocultas y cuando estas salen a la luz pública, ya el daño es irreversible.
Así sucedió con la crisis de los opiodes en Estados Unidos, en la que participó la familia Sackler, dueños de Purdue Pharma, firma que contribuyó enormemente con la adicción en la población a la oxicodona, por medio de su analgésico OxyContin.
Será precisamente ese el eje central de una nueva serie que prepara Netflix, que estará a cargo de Eric Newman, productor ejecutivo de Narcos, show que le ha generado buenos números al gigante del streaming, tanto que se animaron a su spin off Narcos México.
Una nota de Hipertextual informa que la serie lleva por nombre Painkiller, y añade que Newman no estará solo, ya que lo acompañará Peter Berg —responsable de The Leftovers y Ballers— y de Alex Gibney —versado productor de series documentales, tales como Dirty Money y The Clinton Affair—.
El seriado se basará en el reportaje La familia que construyó un imperio de dolor que publicó Patrick Radden Keefe en The New Yorker, así como también en el libro Pain Killer: un imperio del engaño y el origen de la epidemia de opioides en Estados Unidos, de Barry Meier, indica el medio español, que agrega que la trama estará centrada en la familia Sackler.
Sin fecha de estreno aun, y en etapa de planificación, Painkiller también contará con Keefe y Meier, como consultores. La dirección recaerá sobre Berg, mientras que Micah Fitzerman-Blue (A Beautiful Day in the Neighborhood) y Noah Harpster (Maleficent: Mistress of Evil) se encargarán del guion y funcionarán como showrunners.
Sackler: miles de muertos sin disparar
La familia Sackler, considerada más rica y poderosa que los Rockefeller, amasaron miles de millones de dólares a principios del siglo actual, gracias a la adicción que generó su medicamento OxyContin, que tiene como principio activo la oxicodona, sustancia altamente adictiva que conllevó muertes sin precedentes.
Según la BBC, esta crisis, en la que también se beneficiaron otras corporaciones del ramo, generó más muertes que las agresiones militares de EE. UU. contra Vietnam y de Afganistán juntas, pero sin que se disparara una bala.
El medio británico recoge investigaciones de The New Yoker y de Enquire, que revelan toda una campaña millonaria orquestada por Purdue Pharma, para que los médicos del país norteamericano recetaran opiáceos de forma menos rigurosa, lo que generó una epidemia de adictos.
Solo en 2012, miles de médicos escribieron más de 282 millones de recetas para analgésicos opiáceos, incluidos OxyContin, Vicodin y Percocet, una cantidad que equivalía casi a un frasco por cada habitante de la nación, agrega la nota.
Entre agosto de 2013 y diciembre de 2015, varias empresas farmacéuticas, entre ellas Purdue Pharma de la familia Sackler, pagaron más de 46 millones de dólares a más de 68 mil galenos en todo el país a través de comidas, viajes y honorarios para incitarlos a recetar opioides.
En 2016 —cuando la revista Forbes decretó a los Sackler como una de las familias más ricas de ese país, con un patrimonio de $ 13.000 millones— la Agencia de Investigación y Calidad de la Asistencia Médica de Estados Unidos reveló que murieron en EE. UU. más de 60.000 personas por sobredosis de opioides.
Con información de BBC, Hipertextual y IMDB