Congreso y una estrella del norte

Las nubes dejan ver un poco de sol antes de la puesta y los antofagastinos avanzan lentamente hacia las Ruinas de Huanchaca. Allí los espera un escenario que tiene como telón de fondo la antigua fundición boliviana y al grupo Congreso, que cumpliendo con sus planes de los 40 años, presenta junto a la Orquesta Sinfónica de Antofagasta algo de lo más elaborado de su repertorio.

En un cruce entre versiones sin y con acompañamiento orquestal, el grupo oriundo de Quilpué logra no sólo recorrer su repertorio, sino que instalar la emoción y los recuerdos entre los asistentes con más edad, así como la frescura y soltura de las interpretaciones para aquellos que no los han visto en vivo o que no superan la treintena.

Eso no sólo tiene la fuerza musical que logra Congreso, en arreglos para orquesta de Tilo González, y en el aporte que la formación hace desde cada integrante, sino también en la soltura con que Francisco Sazo va engarzando historias y comentarios, que junto a sus letras hacen que la jornada no sólo tenga la riqueza musical y la participación de un público que superó las 3.500 personas , sino que va dejando un mensaje, una idea, que tienen que ver con lo que dice en “En horario estelar” o en “Hijo del diluvio”.

Los comentarios finales hablan de alegría, de ganas de fotografiarse con los músicos, de pedir más y más temas, de sentir que la oportunidad es casi única y que pasarán varios años antes de volver a escucharlos nuevamente. Y conscientes de eso, los integrantes del grupo se brindan, se despliegan en su entrega musical y afectiva, por eso Sazo se queda escribiendo mensajes y saludos en las entradas para todos quienes se lo pidan, por eso González y Pirovich son llamados incesantemente desde las rejas, por eso Aliaga, Atenas y Faure son saludados a la distancia, reconociendo su trabajo. Por eso no hay mejor final que esa historia de “Estrella”, aquella muchacha del norte que se quedó en un andén de los años y que ahora brilló con toda su fuerza.

¿Cuándo y dónde fue?
17 de diciembre
Ruinas de Huanchaca, Antofagasta
20:30 horas
Entrada liberada

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