Buenos Aires. Un artesano practicante de la disciplina de combate medieval cautiva al público en Buenos Aires, Argentina, con la restauración de armaduras medievales en su taller. Estos atrezos se utilizan en el país sudamericano para justas que permiten recrear los estilos de vida propios de la Europa de los siglos V a XV.
Se trata de Marcos Villani, uno de los fundadores de la práctica del combate medieval en Argentina, que recibió a Xinhua en su taller del barrio de Colegiales, al norte de la capital, rodeado de armaduras, espadas, cascos y escudos.
«Traer los materiales desde el extranjero cuesta muchísima plata», dijo el artesano a Xinhua, mencionando una de las razones por las cuales se dedica a confeccionar y restaurar todo tipo de artefactos medievales personalmente.
«Las armaduras se venden hechas. Las hacen armeros extranjeros. Pero poner tres mil euros para comprarse una armadura está muy lejos del alcance que podemos tener todos nosotros»
Marcos Villani
Villani resaltó que, en Argentina, se ha «desarrollado mucho lo que es la confección, creación y mantenimiento del equipamiento medieval, ya sea desde la ropa que tenemos que usar debajo, hasta las protecciones, que son de cuero y de metal».
Un verdadero «caballero»
El hombre, que se autodefine como un verdadero «caballero de la Edad Media», suele protagonizar competencias en las que abundan hachas y espadas medievales, justas que suelen celebrarse en distintos lugares del Área Metropolitana de Buenos Aires.
«Hay muchísimo trabajo que realizamos manualmente, como moldes de madera para curvar escudos o apoyar la espada. Se aprende también a hacer cerámica. Se le da la oportunidad a muchos artesanos que nos rodean en este ambiente medieval»
Las recreaciones de los combates medievales no incluyen solo la representación de esas batallas, sino también la presencia de artesanos que trabajan con materiales de la época, bandas de música con temática medieval y celta, además de gastronomía, todo en un ambiente de amistad y camaradería.
«Todos ayudamos a todos. Hay armeros argentinos que hacen espadas, armaduras y que pudieron de esa forma salir de un pozo económico. O hacerlo simplemente porque les gusta y para darse una oportunidad laboral distinta e independiente. La actividad medieval abre un abanico increíble de cosas, como cerveceros que hacen cervezas, que también es algo histórico y medieval»
Villani insistió, de hecho, en que «no hay límite para todas las actividades que se pueden hacer dentro del ambiente medieval». Y también hizo hincapié en la importancia del compañerismo a la hora de compartir nuevas técnicas al ser una actividad que «se hace por placer».
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