Ganador de SANFIC5 critica a cadenas de cine

Está feliz. Y no es para menos, su película “Paseo” fue premiada en la quinta versión del Festival Internacional de Cine Santiago SANFIC como Mejor Película en la competencia de Cine Chileno por el jurado compuesto por el cineasta estadounidense Azazel Jacobs, el director mexicano Gerardo Naranjo y el académico portugués Antonio Pinto Ribeiro. Es Sergio Castro San Martín arquitecto y director, egresado de la Escuela de Cine de Chile. Pero no por eso no deja de evidenciar las dificultades que encuentra el cine chileno al momento de exhibir sus trabajos.

Y si bien explica, el premio representa mucho, “esta película es un proyecto de tesis de la Escuela de Cine de Chile por lo que se comienza a desmitificar que las películas de estudiantes no pueden competir con otras de mayor presupuesto. También en otro sentido el premio significa hacer avanzar la película”.

Pero todo lo bueno, choca con que las grandes cadenas de cine, como Hoyts y Cinemark, no permiten una presencia permanente en las salas. Según señala Castro, “lo que sucede hoy con películas chilenas de autor, independientes y que experimentan nuevos lenguajes es que tienen un ‘corto circuito’ a la hora de estrenar en salas con más de una copia en 35. Tal es el caso de ‘Navidad’, una película que pese a su selección en Cannes no tuvo ni siquiera el tiempo de un boca a boca para que la gente pudiera ir a verla. Me parece muy triste y grave que aún no haya cuota de pantalla o impuestos al cine norteamericano como pasa en otras latitudes”.

Castro también apunta a otros responsables, ya que señala que es urgente que haya “campañas publicitarias apoyadas por fondos estatales que aporten a un mayor consumo de cine chileno. Es importante tener presupuestos en estos ítems, porque sino las películas chilenas simplemente no se verán”. Agrega que en su caso particular, “por el tipo de película que es, necesita tiempo para poder digerirse y transmitirse. Soy de la idea de gestionar con alguna sala de cine independiente en Santiago y en alguna región para exhibir la película por un tiempo prolongado, pero no depender si tuviste 500, 1000 o 5000 espectadores en tu primera semana. No nos interesa tener 10 copias o más repartidas por la ciudad, no nos interesa estrenar en Hoyts, Cinemark o dónde sea, de las transnacionales del cine”.

El creador destaca que “de alguna manera cada película por el tipo de lenguaje y narrativa que ocupa debe tener su propia ventana y por eso lo que hace Cine Arte Alameda, la Cineteca, Lastarria 90, es muy pero muy bueno, pero el problema es que debemos lograr que la gente llegue a esos lugares”.

Por eso “Paseo” no tiene aún fecha de estreno, ya que explica Castro, prefiere un recorrido largo por festivales, y quizás estrenarlas en el 2010. “En estos momentos -agrega- se están gestionando conversaciones con programadores y festivales para poder llevar la película a otras latitudes como con Bafici, Prossimo Futuro en Lisboa, entre otras cosas”. Explica el autor que “Paseo” narra la historia de una madre que decide emprender un viaje junto a su único hijo en busca de un padre perdido luego de diez años de silencio y separación.

Paralelamente Castro prepara un trabajo sobre la banda Electrodomésticos, que según relata “va caminando bien, tenemos programado el rodaje para el primer semestre de 2010 a la espera de poder tener los fondos estatales para poder rodar y postproducir adecuadamente. De igual forma todo este tiempo ha servido para adentrarse, investigar y registrar ciertas cosas que servirán mucho. El proceso de los documentales debe ser muy paciente, es muy largo ya que debes ir conociendo e involucrándote con los personajes, en este caso con la banda, con la movida cultural de esa época y todo eso”.

Y además elabora otro registro cinematográfico de ficción que ganó un fondo CORFO y que se llama «Días de Barrio», una comedia triste que transcurre íntegramente en la comuna de San Miguel y que narra el retorno de Gabriel Miranda, un chileno residente en Argentina que debe viajar a Santiago a hacerse cargo de la vieja casa familiar que se vendió a una inmobiliaria y que esta pronto a demolerse.