Grupo Sube: «En una panorámica tan hostil como la actual, disfrutamos a concho cada momento en el que podamos crear y expresarnos libremente»

Siempre que se cierra un año, llegan inevitablemente los resúmenes y revisionismos. Si tuviéramos que hacer un balance del 2020, más allá de la pandemia misma, podríamos decir que pasaron dos cosas fundamentales en lo que a música se refiere: una, que los formatos conocidos de difusión tradicional y conciertos tuvieron que dar paso a nuevas formas de llegar al público, cada vez más creativas, a través de las nuevas tecnologías y en segundo lugar, que este año dejó en nuestro país una gigantesca creación musical.

Grupo Sube: «En una panorámica tan hostil como la actual, disfrutamos a concho cada momento en el que podamos crear y expresarnos libremente»

Autor: Carlos Montes

En Chile, las propuestas artísticas son variadas, llenas de colores y matices y entre éstas está Sube, banda de rock onírico, progresivo y personal, que durante este 2020 liberó una serie de singles, para luego estrenar su disco llamado Re-versa.  La banda es parte de sello Persea, cuyo foco es apoyar propuestas que mezclen música contemporánea, poesía y arte, para crear un movimiento que invite a la reflexión. Para eso Sube es definitivamente la banda perfecta: desde su maravillosa canción “Una mañana”, delicada y ensoñadora, hasta otras creaciones más cercanas al jazz como «Alas para el Fuego» o definitiva poesía con «Sale el Sol (no sale)». Un gran trabajo, por el que se hace necesaria esta conversación con Amanda Mura, compositora y vocalista y Raúl Moya, bajista de la banda.

Ustedes se autodenominan «banda de rock onírico» ¿cómo llegaron a esa definición? ¿hay otras bandas que desarrollen un estilo similar, creen ustedes?

Llegamos a esta definición luego de darnos cuenta que algunas canciones del primer disco hablaban literalmente de sueños, pesadillas ó situaciones inexplicables que podrían ocurrir soñando. Este imaginario está inspirado en la literatura onírica o en el realismo mágico; también se retroalimenta con el arte de nuestros discos, creado por Américo Retamal, que en conjunto dan una imagen sonora que se autodenomina de esta forma. Nos cuesta encasillarnos en un estilo predeterminado. Algunos referentes son King Crimson, Congreso, Pink Floyd, Bjork , Spinetta, Café Tacuba entre otros, que pueden tener ciertos elementos similares a nuestra música, sobre todo porque nos gustan y nos inspiran. 

¿Cómo ven ustedes la escena de música progresiva en nuestro país?

Existen bandas que tienen elementos progresivos pero no creemos que sea algo que predomine ya que cada vez más se mezclan distintas influencias y culturas del mundo entero, sumado a los infinitos recursos sonoros y tecnológicos que hay en la actualidad. Desde lo que se entiende como progresivo (cambios inesperados ó métricas irregulares) sentimos que en esta área tenemos cosas en común con bandas como Antonio Monasterio, Media Banda, Indómita , CAF, Nico Carreño y también las bandas que están en nuestro sello Persea, entre otras. 

¿Cuáles han sido los desafíos que ha presentado para ustedes esta pandemia en la difusión de su trabajo? ¿Creen que la pandemia ha hecho las cosas más difíciles para los artistas independientes o en su caso lo han visto como una oportunidad?

El desafío mayor fue lanzar nuestro segundo disco de manera digital, algo totalmente nuevo para nosotro. Pusimos mucho hincapié en el arte de cada single y del disco en general a través de carátulas estáticas y en movimiento creadas por Américo Retamal;  cada integrante aprendió a grabarse desde su casa por lo que pudimos generar “videos de cuarentena” grabando canciones a la distancia. La pandemia sumada a un gobierno que no sabe cómo guiar este país en donde la última prioridad es la cultura, claramente hace las cosas más difíciles para todo el rubro artístico. En nuestro caso la formación de audiencia es clave para generar apertura a la diversidad de música que existe en Chile. Sin embargo, estamos muy agradecidos por las oportunidades que se nos han dado, como nuestra presentación en Imesur o estar grabando nuestro primer videoclip en estos momentos. En una panorámica tan hostil como la actual, disfrutamos a concho cada momento en el que podamos crear y expresarnos libremente.

Cuéntennos sobre Re-versa, el último disco de Sube. ¿Cómo es el proceso de creación en la banda? porque llama la atención por ejemplo que tienen temas de 30 segundos, otro de un minuto y uno de 7 minutos. ¿Cada tema es un lienzo en blanco?

El proceso parte de una “maqueta” que presenta Amanda, luego toda la banda la moldea con sus propios arreglos y visiones hasta llegar a un resultado en común. En las sesiones de grabación aparecieron temas cortos con una letra improvisada alusiva a otras canciones del disco. Algunos temas alcanzaron una duración de 7 minutos que surgió a través de la experimentación y libertad creativa en las ideas que se nos fueron ocurriendo. El hecho de hacer una canción “radial de 3 minutos” nunca ha sido nuestro foco, sino más bien hacer “lo que la canción pida” y lo que nos deje a gusto creativamente, explorar sin fin ya que infinitas son las posibilidades es algo que prevalece en nuestra forma colectiva de hacer música y que además nos deja muchos aprendizajes. Respecto a la última pregunta podríamos decir que Amanda lleva el lienzo y la banda en conjunto la pinta.

Una mañana, uno de los temas de Re-versa, está construido en clave de canción tal vez más «tradicional»  en su estructura que las otras canciones ¿A qué está dedicada esa canción? ¿por qué en un formato diferente?

En esta libertad creativa también se busca tener variadas sonoridades, en este caso se incorporó un arreglo de cuerdas junto a las dos voces y piano para generar un ambiente más emotivo de acuerdo a lo que expresa la narrativa.  Este tema nace a raíz de un conflicto que tuve con un taxista en la noche, que me dejó tirada en la calle a las 4 de la mañana, sola con mi teclado gigante (venía de regreso a mi casa luego de trabajar tocando en vivo ). Este conflicto sumado a una serie de sucesos desafortunados me tenían muy triste, esa noche pase de largo y en la mañana llegó esta canción para abrazarme y dar el cobijo y la tranquilidad que andaba buscando.  

Re-versa, la canción que se titula igual que el disco, dice «reversa la vida, el amor, la canción». ¿Pueden referirse al mensaje que quieren transmitir en ese tema?

Este tema nace a raíz de una gira que tuvimos al sur de Chile, también nuestros tránsitos nos ligan a Valparaíso ya que Elías (vocalista de la banda) vivió en esa ciudad mucho tiempo, estas diferentes geografías y el viaje  influenciaron esta canción. La naturaleza y la música, paisajes como el mar ó un lago son tremendamente inspiradores y resignifican todo desde el amor. 

¿Cuáles son los desafíos para Sube este 2021?

Nuestros desafíos son estrenar por fin nuestro primer y segundo videoclip que actualmente estamos grabando en Valdivia, nos interesa mucho mostrar la hermosa geografía que tiene este lugar, desde la imagen podemos evocar a la valiosa naturaleza que debe ser cuidada y respetada. También nos gustaría poder hacer una sesión en vivo de nuestro segundo disco Re-versa o grabar un 3er disco en el caso de que se apruebe un proyecto al cual postulamos. Esperamos pronto poder comunicar estas novedades en nuestras redes.

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*Por Pamela Gaete


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