Lo postularán al Guinness como el participante más longevo de la competencia
La relación de James McManus con el tango se inició en 2002, cuando vio, con admiración, bailar a una pareja de argentinos. Desde entonces se desató en él una pasión por el ritmo predilecto de los porteños, que va más allá de los convencionalismos.
El hombre de 99 años es irlandés, veterano de la II Guerra Mundial y está cumpliendo su sueño de estar en Buenos Aires participando en el Festival Mundial de Tango, que tiene lugar en el Auditorio de la Usina del Arte, en el barrio de La Boca.
«El tango me genera mucha felicidad. Y además bailar es muy importante socialmente, te relacionas con personas diferentes, haces nuevos amigos», contó en entrevista con la prensa argentina, en la que reveló que es fanático de Juan D’Arienzo, músico y director de orquesta argentina de tango, conocido como “El rey del compás”.
Su viaje fue financiado por aficionados irlandeses al tango que juntaron el dinero de manera solidaria para que él pudiese cumplir su sueño.
Reveló que no se subía a un avión desde 1981. Vestido con un sobrio saco blanco, pantalón negro y corbata al tono, bailó en la primera ronda clasificatoria con una compañera argentina, Lucía Seva. Se llevó los mayores aplausos del público en el escenario.
La edición 2019 del Mundial incluye a 744 parejas de 36 países, 5 más que en 2018. Entre otros figuran: Bélgica, Brunéi, Canadá, China, Corea del Sur, Cuba, Estados Unidos, Filipinas, Francia, Grecia, Holanda, Hong Kong, Hungría, Japón, Malasia, Taiwán, Turquía y Uzbekistán.
En las rondas clasificatorias más de diez parejas bailan al mismo tiempo, circulando en el sentido opuesto de las agujas del reloj. Tienen la oportunidad de cautivar al jurado -sentado bien cerquita, en el escenario- a lo largo de tres temas, detalló un reportaje del diario Clarín.
La interpretación de James junto a la bailarina argentina Lucía Seva fue impecable. Sin titubeos, con el torso erguido y abrazando firme y fuerte a su compañera, generó admiración y entusiasmo.
Fue una inspiración para todos y, más allá de si continuará avanzando o no en esta competencia, ya sumó un hito en su historia personal y en la del Mundial.
Según los organizadores, James es la persona de mayor edad en competencia. Así es que tratarán de certificar este logro en el Récord Guinness.
El irlandés contó que como veterano de la Segunda Guerra Mundial, formó parte de la Royal Army. Cuando el conflicto bélico llegó a su fin, continuó su carrera como telegrafista y operador de radio en la Marina, con la que viajó por el mundo. Y aunque nació en Paisley (Escocia) vive desde 1994 en Waterford, al sur de Dublin, y se declara «irlandés».
Hace 80 años que frecuenta las pistas de los clásicos ballroom. Todos los martes a las 19:00, James toma clases de tango, a las que llega manejando. Y siempre tiene una ginger beer bien cerquita: «Es buena para el corazón», aseguró sobre esta cerveza de jengibre muy tradicional en Irlanda. Además toma otras clases de baile -hasta cinco por semana- y es habitual que los sábados participe de alguna fiesta o evento.
Hernán Catvin, un bailarín argentino radicado en Irlanda, y la irlandesa Tara Whelan, también maestra de tango lo acompañan en Buenos Aires. Piensan llevarlo a recorrer algunas de las milongas porteñas más famosas.
Describen a James «como una persona muy disciplinada. Jamás falta a una clase y para todos se ha transformado en una inspiración, por eso también fue un éxito la colecta de toda la comunidad tanguera de Irlanda», contaron.
«Hernán es mi mentor, sin él no hubiera podido estar acá», aseguró James. Sienten admiración mutua. Para subir al escenario de la Usina del Arte, usó un par de zapatos de cuero, acordonados y combinados, marrones y blancos.
Pero extrañó mucho unos que usa desde 2005, regalo de una amiga entrañable: «Son azules y blancos, creo que ya están agujereados. Me prohibieron que los traiga», dijo soltando una carcajada.
El 5 de enero cumple los 100 años y ya tiene reservado un salón, porque él mismo se encargará de organizar los festejos. Invitados no le faltarán, y anécdotas, tampoco.
Hasta este jueves 15 se llevarán a cabo las rondas clasificatorias de Tango de Pista y Tango Escenario en el Auditorio de la Usina del Arte (Caffarena 1, La Boca).
El viernes el Mundial continúa con la Gala de Preliminares; el sábado y domingo serán las Semifinales; y el martes 20 y miércoles 21 las finales, pero en el Luna Park (Tango de Pista y Tango Escenario, respectivamente).