11 fotos que relatan el drama que ha vivido Shakira desde 1997 hasta ahora

Shakira está de vuelta, con casi 40 años encima y un cuerpo que jamás estuvo mejor desde que la conocimos. La barranquillera, a la que le han dicho argentina, española y en general todo menos colombiana, ha vuelto dos veces a su ciudad natal en menos de seis meses y ha dejado claro con exitosas colaboraciones con compatriotas como Carlos Vives y Maluma, que lo suyo es cantar en español para un público que la vio nacer y le agradece su canto.

Es difícil definirla ahora. Musicalmente Shakira no es sólo compleja, sino también un poco indecisa. En varios intentos -y en casi todos sus álbumes -la colombiana ha querido poner el rock como su huella, pero difícilmente ha logrado pegar temas de esta consonancia ya que, para el público mayoritario, Shakira es pop, ritmo latino y caderas.

Cuando la vimos en su álbum “Dónde están los ladrones”, con el que ganó mayor reconocimiento a finales de los 90, Shakira era rockera hasta los huesos. Su maquillaje era fuerte y poco favorable, por no hablara de los cientos de looks con los que buscó impactar en el escenario. En esta fotografía de “Ojos así”, Shakira mezcló el rock con ritmos árabes.

“Inevitable”, otro éxito de la colombiana, tiene un costado más romántico y por lo tanto se apoyó en la balada para lograr lo que es uno de los fuertes talentos de Shakira: una excelente composición. Si hay quienes la culpan por no saber cantar, es posible contestarles que Shakira no es sólo una cantante, es una compositora de aquellas que todavía pasan horas en el estudio tratando de sacar temas que realmente digan algo.

Cuando llegó la época de “Servicio de Lavanderia“, Shakira pasó de pelinegra a rubia, un tono de color que conservaría (en varias modalidades) hasta la actualidad. Pero fue algo más que el cambio de look: Shakira había logrado entrar en Latinoamérica, sostenía una relación con el hijo de un expresidente argentino y éste la llevó de la mano al éxito mundial. Con un reinventado look y un nuevo estilo musical, Shakira se quedó rondando en el pop-rock.

Pero como la misma Shakira lo ha dicho en varias ocasiones, su “tesis de graduación” fue Fijación Oral Vol 1 y 2. Un disco que tuvo que ser dividido porque a la colombiana literalmente “se le fue la mano componiendo”.

Este álbum, que tiene grandes éxitos como lo fue “La Tortura” feat. Alejandro Sanz, llevó derecho a Shakira hacia el renombre internacional y la inmortalidad musical. Después del debut de Fijación Oral, Shakira no sería más la colombiana rockerita y pasaría a ser una sensual autora de éxitos virales, en una época en que Internet ya hacía de las suyas y era posible descargar (con cierta lentitud) algunos éxitos. Hips don’t lie, agregado a Fijación Oral Vol. 2 fue el sencillo más descargado por Internet en ese 2005/2006.

Una segura de sí misma Shakira, que había tocado la cima de su carrera tras haberse presentado en la clausura del Mundial 2006, quiso hacer “lo que se le vino en gana” con su siguiente álbum. Shakira ya tenía una relación de 9 años con Antonio de la Rúa y estaba en una época en la que quería explorar su sensualidad hasta el límite. Así lo hizo en “Loba”, otro éxito que se hizo mundialmente famoso porque Shakira jamás había mostrado tanta piel como en este video.

Y luego vino la época “Loca” de la barranquillera, ya enamorada de su actual pareja, Piqué, el futbolista español a quien conoció en la preparación de “Waka Waka This time for África”, canción que fue himno del Mundial 2010, que ganaría la selección de su futuro novio.

Tras haber tenido su primer hijo, Shakira vuelve a lanzar sencillos, varios de ellos sin mucho éxito, pero manteniéndola en las principales listas de música.

Después de su segundo embarazo y su tercera participación consecutiva en el Mundial 2014, Shakira retoma su carrera en el 2016 con colaboraciones exitosísimas que la devolvieron a sus orígenes. Carlos Vives y Shakira hicieron el tema más escuchado en varias listas musicales, llamado “La Bicicleta“, una canción que habla de la tradición colombiana, del amor a la tierra y también del amor que le tiene a su pareja y a Barcelona.

El drama de Shakira, señores, es aquello único que la barranquillera no ha podido lograr pese a su evidente éxito: ser ella, ser totalmente rockera como en sus inicios. Sus éxitos actuales, “Chantaje” y “La Bicicleta, demuestran que la cantante colombiana ha sucumbido (quizá sin resignarse) a hacer música que le guste al público en general, incluso más que a ella misma. El mercado ha dejado pasar grandes composiciones que la colombiana escribió de puño y letra y en cambio ha elegido reiteradamente temas virales, con pobre composición, poca calidad musical y muy poco de la verdadera Shakira.

Aun así, nadie puede culparla por ello: es su profesión y tiene que mantenerla vigente, además Shakira siempre cola en sus álbumes sencillos de pop-rock, quizá para recordarse que sigue siendo la chica morena de ojos negros y caderas amplias a la que le gusta rasgar la voz y sacudir el pelo -incluso más que sus caderas -porque siente la electricidad del rock subiendo por sus venas.

Pero en fin, al que diga que Shakira no es una cantante consolidada, que le piquen caña. Como regalo les dejamos uno de los conciertos donde Shakira alcanzó su nota más alta:

tkm