Abraham Quezada es un hombre con un amplio conocimiento en la historia y vida de Pablo Neruda. Del premio Nobel ha escrito ocho libros y cada uno basado en cartas que el poeta enviaba a distintas personalidades y amigos. En esta oportunidad su investigación lo llevó a Salvador Allende.
Del expresidente no manejaba muchos documentos, los que quedaban fueron llevados a Cuba, hasta que el gobierno de ese país resolvió por entregar a Chile el archivo. De este acto, se completó la lista de 15 cartas que darían vida al libroPablo Neruda y Salvador Allende. Una amistad, una historia.
Lo valioso del texto está en que nunca antes se había escrito de la relación que mantenían Neruda con Allende, ni menos se había tenido acceso a las cartas que ambos se enviaban. Es por esto que el investigador, que viene trabajando en la parte documental y epistolar del poeta, es el primero en formular un texto.
Para el autor, la carta es concebida como un documento relevante, “de Neruda se han escrito muchos libros y cientos artículos, no obstante hay un espacio como las cartas, que tienen una doble condición. Primero sostengo que es la forma más pura de la autobiografía, y en segundo lugar es para un escritor o poeta la totalidad de su lenguaje, ya que es lo que están escribiendo privadamente”, señaló.
El libro está planteado en siete momentos. El primero en la Universidad de Chile, en su participación de la FECH de los años 20; el segundo entorno al Frente Popular, y la transformación de la sociedad chilena; el tercero, en el Senado de los años 40 cuando ambos fueron partícipes de proyectos y leyes; el cuarto, en las campañas presidenciales, y su amistad política; el quinto, relacionado a la amistad que se fue dando desde los años 50 en adelante y que tiene lugar el epistolario entre ambos; finalmente las candidaturas presidenciales y el gobierno de la Unidad Popular, y la vida de Neruda en la embajada de Paris.
En ese transcurso en la lectura se constata que el autor reflejó una relación que se da entre ambos personajes a partir de espacios que compartieron y habitaron. En esa línea el autor asevera que el lazo que los unía se daba no solo por sus rumbos y decisiones, al ser ambos ligados a la política. También era personas que compartían gustos.
“La relación entre ellos, fue una relación de personajes fuertes coherentes, históricos y que varias cosas compartieron. Ambos eran seductores, no solo respecto al género femenino, sino que también en sus entornos. Ambos eran coleccionistas, Neruda tenía una manía importante y Allende era aficionado de ropa ajena, le gustaban las chaquetas y corbatas de los amigos, y de ello salen muchas anécdotas”, cuenta.
Por su parte, el presidente del directorio de la Fundación Salvador Allende, Osvaldo Puccio Huidobro, que participó en la presentación del libro, destacó el trabajo del autor al ser un documento valioso.
“Abraham es un diplomático, que trabaja con una cierta visión y posición del país. Se preocupa de dos personajes centrales y polémicos de la historia de Chile y lo hace por medio de un trabajo histórico. Contextualiza a los personajes en su período histórico, ambos tienen en común elemento central en su formación que es su cercanía, coqueteo y admiración por el anarquismo. Como también estos dos gigantes son hijos legítimos de la educación pública, cosa que tiene que ver con los días que vivimos. Se entiende que la cultura, el compromiso nacional se construye en una educación con acceso reducido pero abierto y público, como fue lo que vivieron Neruda y Allende”, puntualizó.
Pablo Neruda y Salvador Allende. Una amistad, una historia fue editado por Editorial RIL y ya se encuentra a la venta.