Reunidos en la 2º Convención de Cineclubes de Chile, en el marco del 18° Festival Internacional de Cine de Valdivia, y agradeciendo la visita de representantes de la Federación Internacional de Cineclubes (FICC) el pasado 16 de octubre, las agrupaciones manifiestan que:
1.- El conflicto educacional chileno ha puesto en evidencia que no sólo este campo está mercantilizado, sino también el acceso a la cultura, a los conocimientos y específicamente el arte cinematográfico. Por ende, las personas han perdido su derecho esencial al libre acceso a las ideas, a la información y a la educación como público, así como a las posibilidades de asociarse y educarse por medio del cine.
El estado de las cosas no se cambia manteniendo el modelo actual. Lo que los cineclubes ofrecemos es conocimiento y la formación de un individuo íntegro. No aceptamos las reglas de un juego perverso que nos divide como prestadores de servicios y clientes.
2.- Reivindicamos el trabajo de los cineclubes chilenos como los agentes del desarrollo de la libre educación y de los derechos del público, asumiendo que el cine es ante todo arte.
Ante la inexistencia de escenarios que garanticen la difusión bajo un prisma académico del cine, los cineclubes establecemos un sistema ajeno a los hoy existentes, para que el público pueda acceder a aquello que el mercado le niega.
Los cineclubes no somos agrupaciones cerradas, sino el puente entre ciudadanía y cinematografía. Además, promotores del patrimonio audiovisual, de la diversidad y la memoria histórica.
3.- Denunciamos el aprovechamiento de empresas privadas e instituciones que lucran en torno al acceso al arte cinematográfico amparándose en el desconocimiento de la comunidad por sus derechos, así como en los vacíos de la ley de propiedad intelectual chilena. Propugnamos difundir que los cineclubes nos amparamos en las excepciones del articulo 71 de la Ley N° 20.435 sobre Propiedad Intelectual. Emplazamos enfáticamente al Estado a multiplicar y diversificar las políticas públicas en pos del desarrollo del conocimiento y formación de ciudadanos críticos e íntegros a lo largo y ancho del país.
4.- Condenamos las medidas gubernamentales que han beneficiado económicamente a las empresas privadas que tienen como objetivo principal la comercialización, camuflándose como formadores de públicos. El Estado debe garantizar que programas sistemáticos, como los cineclubes, sigan cumpliendo esa labor.
5.- Con base en estos puntos, la Red de Cineclubes de Chile plantea las siguientes acciones:
• Ampliar y divulgar el primer Catastro de Cineclubes Nacionales.
• Apropiarnos de los medios digitales en pos de fortalecer nuestra Red.
• Conmemoración del 10 de mayo como el Día del Público.
• Celebración del 30 de agosto como el Día del Cineclubismo chileno, conmemorando el natalicio del doctor Aldo Francia, impulsor de la actividad en nuestro país.
• Poner en práctica un programa de creación de cineclubes en todo Chile, por medio de publicaciones y capacitaciones, priorizando las comunidades que no cuentan con un sistemático y diverso acceso al cine.
• Generar el proyecto “Cine Itinerante”, destinado a proveer a los cineclubes, a lo largo del país, del cine chileno que ha quedado vedado de la amplia ciudadanía, incluyendo cortometrajes, documentales y largometrajes nacionales.
• Realizar en 2012 la 3° Convención de Cineclubes de Chile.
El Ciudadano Nº113, primera quincena noviembre 2011