Vía Radio Universidad de Chile / Macarena Valdés fue encontrada por uno de sus hijos colgada de las vigas de su propia casa. La mujer era una líder ambientalista del sector de Panguipulli, tenía 4 hijos y no presentaba ningún antecedente de algún problema de ánimo o salud mental. Sin embargo, el informe de autopsia entregado por el Servicio Médico Legal afirmó que su muerte se debía a un suicidio.
En su casa, al momento de su muerte, estaba la comida preparada y el bolso del hijo menor listo para salir al consultorio, algo que para la familia era prueba de que no se había suicidado, pues para qué había dejado todo preparado tal como si fuese a realizar su rutina normal.
Desde entonces Rubén Collío, su esposo, junto a la comunidad mapuche Newen de Tranguil, han llevado a cabo una lucha constante para poder lograr demostrar que la muerte de Macarena no fue un suicidio sino un asesinato a causa de lucha por la defensa del territorio en el sector de Río Tranguil. Con ese objetivo fue que se llevó a cabo un peritaje particular que solicitó la familia, el que fue realizado por el perito forense Luis Ravanal, y que desestimó la tesis del suicidio, pues su cuerpo no presenta evidencias de haber sido colgado con vida.
Con este antecedente, la familia confirmó su hipótesis de que Macarena Valdés fue asesinada por ser la guía de la resistencia contra la hidroeléctrica Mini Central de Paso Tranguil de la empresa RP Global, y que su muerte busca asustar a quienes quisieran oponerse al proyecto. Pero ni su familia ni su comunidad se han dejado amedrentar y han continuado con su movilización para demostrar la verdadera causa de muerte de Macarena.
Por esto, en el marco de la conmemoración del segundo aniversario de su muerte, la Coordinadora Justicia para Macarena Valdés ha hecho un llamado a manifestarse e interpelar a la Fiscalía Nacional para agilizar los trámites de entrega del segundo Informe Pericial del Servicio Médico Legal, documento clave para cambiar el curso de este caso.
Rubén Collío, esposo de Macarena, señaló que desde la Fiscalía no existen ganas de investigar, y “se mantiene esta intención de encubrir este homicidio, por lo tanto, lo que nos toca es pagar nuevamente peritajes privados, esta vez buscando la certeza, el prestigio de peritos extranjeros”.
La familia y la comunidad Newen se encuentran realizando varias actividades para reunir fondos y poder costear estas nuevas pericias, y de esta forma seguir entregando antecedentes que den cuenta de que Macarena no se suicidó, sino por el contrario fue victima de la violencia ejercida por luchar contra la preservación y respeto del territorio mapuche afectado por una empresa privada. Aunque sus cercanos saben que el peritaje hecho por Luis Ravanal debería bastar, desde el Ministerio Público no han tomado en cuenta las pruebas que tienen hasta ahora.
Además, Rubén Collío afirmó que no bajarán los brazos hasta esclarecer el caso y también hasta “que salgan todas las empresas del territorio mapuche, porque no es posible que cualquier empresario se venga a instalar al patio de nuestra casa con el único fin de hacerse millonarios y que tengamos que aceptarlo y que por oponernos nos asesinen, nos discriminen, nos vulneren. Ya no estamos dispuestos a permitirlo”.
Para conmemorar la muerte de Macarena Valdés la Coordinadora Justicia para Macarena Valdés hizo un llamado a reunirse este miércoles 22 de agosto a las 19 horas en el frontis del Teatro Universidad de Chile, a un costado de Plaza Italia. En paralelo convocaron a diversos actos de movilización en las calles Barros Arana con Aníbal Pinto de Concepción a las 18 horas, y también en Temuco y Panguipulli.
Fuente: Radio Universidad de Chile