Acusan “desidia» de Cubillos tras nueva suspensión de clases por gases tóxicos en escuelas de Copiapó

El jueves 21 de marzo, la Corte de Apelaciones de Copiapó dictó orden de no innovar y dispuso la inmediata suspensión de actividades en las escuelas El Palomar y Jesús Fernández de la ciudad, luego de una nueva detección de gases tóxicos en ambos establecimientos. El tribunal de alzada ya había acogido un recurso de protección interpuesto por el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), por emanaciones en el primer recinto y en la la Escuela Las Brisas.

Esta vez, la Corte copiapina acogió de forma unánime la solicitud del INDH, debido a que las emanaciones de gases perturban el normal desarrollo de las actividades educativas y significan una afectación a la salud de los estudiantes.

La resolución tuvo “en consideración la gravedad de los hechos que han afectado a los establecimientos educacionales Escuela Jesús Fernández y Escuela El Palomar, considerando que respecto de la primera de dichas escuelas se constató con fecha 14 de marzo pasado la presencia de gas sulfhídrico y monóxido de carbono, a solo escasos días de que la Ilustre Municipalidad de Copiapó realizara un lavado hidráulico de sus cámaras desgrasadoras, lo cual importa considerar que dicha acción al igual que otras que la recurrida ha venido realizando en los diversos establecimientos de esta ciudad no han sido eficaces para resguardar la integridad de dicha comunidad educativa”.

Para el tribunal de alzada no existe “ningún antecedente por el momento que permita excluir el riesgo que tales situaciones se repitan hacia futuro”, por lo que ordenó “la inmediata suspensión de actividades escolares, en los referidos establecimientos y hasta que la recurrida Ilustre Municipalidad de Copiapó acredite que tales situaciones han sido superadas y/o que no revisten una amenaza seria para quienes forman parte de dichas comunidades”.

«Sin perjuicio de lo anterior y considerando las medidas posteriores informadas que se habrían adoptado por la Ilustre Municipalidad de Copiapó, la Superintendencia de Servicios Sanitarios deberá informar a esta Corte, dentro del plazo máximo de cinco días, las medidas adicionales que dicho Municipio deberá emprender para efectos de superar de manera eficaz las problemáticas que afectan a la Escuela El Palomar y a la Escuela Jesús Fernández, junto con un cronograma de las mismas”, concluyó la Corte con sede en la capital de Atacama.

Colegio de Profesores: “Qué pasa con un ‘aula segura’ para los niños de Copiapó»

Como una “pésima noticia” calificó el presidente del Colegio de Profesores este nuevo fallo de la Corte de Apelaciones. “Lo que hay acá es una desidia que nosotros ya denunciamos. Precisamente, días atrás enviamos una carta a la ministra de Educación (Marcela Cubillos), pidiendo que esta actitud pasiva, que uno ha observado en el Ministerio respecto a estos fenómenos tan graves, se termine y que se dedique la ministra a lo que es su labor, que es asegurar el buen funcionamiento del sistema escolar”, afirmó el representante del Magisterio.

Mario Aguilar

El dirigente insistió en sus críticas hacia la secretaria de Estado, debido al despliegue de la cartera para promocionar proyectos como “Aula Segura” o “Admisión Justa”, con gira nacional incluida. “Cuando uno observa a una ministra ausente, que está dedicada a otras tareas de tipo publicitaria, que más parece campaña electoral, faltando tanto tiempo para las elecciones, y no dedicación a los que son sus tareas, como es asegurar el normal funcionamiento del sistema escolar, uno observa que hay un déficit muy grande”, sostuvo Aguilar, quien remarcó que “la situación de Copiapó es un reflejo de un sistema escolar público desatendido”.

“Ella (Cubillos) habló durante meses de Aula Segura, a propósito de siete colegios en Santiago que tenían problemas de violencia en los manifestantes, pero qué pasa con un ‘aula segura’ para los niños de Copiapó (…) Ahí no hay ‘aula segura’ ni preocupación por la seguridad”, sentenció el presidente del Colegio de Profesores.