A partir de algunas notas periodísticas que aluden a que el alcalde de Recoleta, Daniel Jadue, estaría en calidad de imputado en la causa judicial por las Torres Bellavista, desde el municipio capitalino emitieron una declaración pública para aclarar la situación.
El texto parte señalando que «el viernes 2 de octubre de 2020 se realizó una audiencia ante el 4° Juzgado de Garantía sobre dos puntos: a) decretar, a petición del Ministerio Público y del Alcalde Jadue, el allanamiento de las oficinas de Desarrollo Inmobiliario Bellavista S.A., ya que llevan más de un año negándose a entregar las Actas de las Sesiones de Directorio y de Juntas de Accionistas de esa sociedad, en las que existen obviamente antecedentes que inculpan a la Inmobiliaria y a sus controladores; y b) decretar el sobreseimiento definitivo del Alcalde Daniel Jadue, lo que obviamente supone que se hayan realizado todas las diligencias».
El escrito agrega que «el Tribunal le dio plazo hasta el 9 de octubre a la Inmobiliaria para entregar los documentos que ha ocultado durante un año con versiones contradictorias, y de no entregarlos, se ordenará el allanamiento de la Inmobiliaria, por lo tanto el sobreseimiento deberá decretarse una vez concluyan las diligencias, entre ellas, que la inmobiliaria cumpla con lo ordenado de entregar los documentos que mantiene ocultos».
Para el municipio de Recoleta, «esta arremetida comunicacional de la Inmobiliaria se da luego de que el 8 de junio de 2020, la Ilustrísima Corte de Apelaciones de Santiago, resolviera que no existen incumplimientos por parte de la Municipalidad de Recoleta y que esta entidad sí se pronunció sobre los permisos de edificación, los cuales estarían caducos. Con este fallo quedó claro que la Municipalidad de Recoleta ha actuado en derecho y que el rechazo a la recepción final fue pronunciado en cumplimiento de las normas urbanísticas aplicables a la obra».
Al respecto, el alcalde Daniel Jadue, indicó que «siempre hay costos cuando se combate a la corrupción y se defienden los barrios del negocio de las inmobiliarias, sobretodo de aquellas que son capaces de hacer lo que sea para instalar sus negocios, pasando por encima de toda norma. Nosotros en Recoleta no estamos disponibles para aquello y llegaremos hasta las últimas consecuencias, porque es nuestro deber ético y jurídico. Si me van a perseguir por combatir la corrupción, estoy disponible».
«Esta inmobiliaria, que ha perdido innumerables juicios, está buscando leguleyas para hacer creer que el tema sigue vigente, han perdido todo y tendrán que demoler. Es tal su desesperación que el mismo gobierno ha hecho de vocero de su negocio, lo cual es a todas luces una desproporción y una vergüenza para Chile», cerró el alcalde de Recoleta.