El encargado de las Relaciones Internacionales del Consejo de Todas las Tierras, Aucán Huilcamán, denunció que la visita que efectuó el pasado viernes el ministro del Interior, Víctor Pérez Varela, a La Araucanía, incentivó los odios raciales en contra del Pueblo Mapuche, que derivaron en las agresiones perpetradas el fin de semana contra los comuneros de las municipalidades de Victoria, Curacautín, Ercilla y Traiguén.
«Queda claro que el ministro del Interior, Víctor Pérez Varela vino a autorizar, vino a consentir a ciertos grupos vinculados desde el punto de vista ideológico al partido Unión Demócrata Independiente (UDI)», indicó durante La Entrevista con Francisco Marín, transmitida en lunes en Facebook por El Ciudadano.
Recordó que en su visita a la región, Pérez Varela aseguró que “vendrían hechos violentos en los próximos días” y así ocurrió.
“Vino en la doctrina de la negación y prácticamente a sostener que en La Araucanía los que reclaman derechos serían violentistas y ponerlos en el escenario del terrorismo”, subrayó.
“Con la venida del ministro del Interior explotó el racismo subyacente que hay en el país en contra de los mapuche. En definitiva el clasismo chileno y el racismo chileno se puso de manifiesto en Caracautín”, dijo.
Destitución de Pérez Varela
En la entrevista, el líder mapuche informó que presentó una carta al presidente Sebastián Piñera, para pedirle que evalúe la permanencia de Pérez Varela como ministro del Interior y tome la mejor decisión, “que sería que abandone el cargo, porque con su llegada ha detonado (un odio) que no se había visto jamás”.
También solicitó que se interponga una querella judicial contra los grupos de derecha que propician la violencia racial, como el caso de la autodenominada “Asociación para la Paz y la Reconciliación en la Araucanía”, (APRA) , que se encuentra integrada por latifundistas, agricultores y empresarios forestales.
“Se debe interponer una querella en contra de la directiva del APRA, como porque constituyen un peligro para La Auraucanía y nos pueden llevar a un escenario desastroso de violencia como como lo que sucedió en Yugoslavia, Checoslovaqua y Uganda, al pasar del conflicto político al ámbito racial”, planteó-
“La UDI debe bajar las amenazas, las presiones y los ataques odiosos. Detrás de lo que sucedió en Victoria está la UDI y la APRA que cuentan con el aval de la UDI, y que es una amenaza”, subrayó.
Conflicto histórico
El líder mapuche indicó que para abordar la situación actual, es necesario comprender las cicatrices que dejó llamada “Pacificación de la Araucanía”, que inició en 1860, y que fue un acto de invasión y ocupación de un territorio a través de la fuerza y la violencia, que incluyó masacres, genocidio y violaciones.
Para el portavoz del Consejo de Todas las Tierras, cuando el Estado chileno tomó la decisión formal de invadir el territorio mapuche por la fuerza y la violencia militar se produjeron cuatro hechos.
El primero de ellos es el “crimen de genocidio cometido contra los pueblos mapuche se encuentra en completa impunidad”.
“Por eso hemos planteado la necesidad de establecer una comisión de esclarecimiento histórico para saber lo qué pasó en La Araucanía, porque cada presidente, cada ministro, cada intendente tiene su versión de La Araucanía y necesitamos un estándar de la verdad, justicia y reparación”, explicó.
En segundo lugar, Aucán Huilcamán, recordó que durante la pacificación de La Araucanía se produjo la ocupación del territorio, que es el motivo la causa de la actual controversia.
En tercer lugar se refirió al daño cultural, material e inmaterial que ha sufrido el Pueblo Mapuche y en cuarto lugar a la violación del derecho a la autodeterminación.
Conflicto de intereses
Durante la entrevista, el líder mapuche destacó que los recientes hechos de violencia en La Araucanía ponen de relieve el conflicto de intereses que tiene “toda la clase política” en dicha región.
“Desde los gobernantes, los presidentes, los ministros, diputados, senadores y parte de la Corte de Apelaciones en Temuco, todos tienen patrimonio territorial en La Araucanía”, subrayó.
Además, sostuvo que la violencia institucional le ha dado continuidad al despojo de tierras , que se ha mantenido durante los gobiernos post pacificación de La Araucanía y post dictadura militar.
“Todos tienen responsabilidad, la gran mayoría nos han criminalizado y jamás han aceptado un diálogo bajo los principios de igualdad y autodeterminación”, denunció.
Al ser preguntado sobre ¿Cuándo fue la última oportunidad en el que el Pueblo Mapuche pudo conversar el Estado chileno de igual a igual y llegar a algún acuerdo?, Huilcamán respondió que fue el Tratado de Tapihue, suscrito el 7 de enero de 1825.
Asimismo, destacó que el Gobierno de Salvador Allende marcó un hito porque estableció una norma jurídica para restituir las tierras que fueron objeto de usurpación.
Señaló que mientras que la Ley Indígena de Allende reconocía el derecho a la tierra, la actual Ley Indígena está enmarcada en compra y venta de tierras.
“En la actualidad, el libre mercado está resolviendo la problemática de las tierras mapuche”, condenó.
Verdad y autodeterminación
En la entrevista, dio su opinión sobre la manera en la que se puede resolver el conflicto mapuche.
En primer lugar dejó claro que “no hay en discusión sobre si el territorio si el territorio mapuche es de los chilenos o de los mapuche, porque pertenece a los mapuche”
“Acá no habido guerra, ha habido es invasión, colonialismo y domesticación después de lo que se conoce como pacificación”, dijo al tiempo que planteó que se necesita “conocer la verdad sobre lo que ha ocurrido en la Araucanía desde la post pacificación hasta el día de hoy.”
También argumentó que se debe promover la verdad, la justicia y la reparación al daño causado. Además de “abordar el crimen de genocidio y reparar el daño causado por el despojo de tierras y el daño cultural contra nuestro pueblo y también aceptar que el pueblo mapuche que es titular derecho a la autodeterminación y aceptar un estatuto autonómico para entenderse con el Estado chileno”.
“Ese estatuto de autodeterminación establecerá las formas de relacionarnos”, acotó.
Asimismo, consideró necesario establecer instituciones que fomenten la convivencia firme y duradera y que no sean unilaterales y arbitrarias como las actuales.
Señaló que el racismo que subyace en la sociedad chilena debe ser erradicado, y recordó que el Estado tiene herramientas a su disposición como como la Declaración en contra del racismo y la xenofobia .
Planteó que el Pueblo Mapuche debe seguir promoviendo y defendiendo sus derechos. “Tenemos que trabajar para una paz firme y duradera y para ello se requiere justicia”, aseveró.
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