A pocos días de las elecciones presidenciales, parlamentarias y de consejeros regionales, el subjefe de la Bancada PC, diputado Boris Barrera Moreno, hace un llamado a votar masivamente el próximo domingo 21 de noviembre para derrotar a la derecha y alcanzar un Congreso Nacional “que quiera hacer carne esa Nueva Constitución y nuevas leyes” para el pueblo.
Barrera, candidato a la reelección por el distrito 9 que incluye a las comunas de Renca, Recoleta, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Conchalí, Independencia y Huechuraba, ha centrado su trabajo principalmente en el territorio, junto a las organizaciones sociales que lo reconocen como un legítimo representante de los sectores populares. Oriundo de la población Huamachuco en Renca y cantor popular de oficio, Barrera mantiene siempre una agenda repartida entre el trabajo legislativo y el territorial.
En medio del ajetreo electoral y donde el Partido Comunista apuesta por mantener el doblaje en el distrito 9, le consultamos cómo se encuentra frente a este nuevo desafío.
“Bueno, me encuentro ansioso, nervioso. Espero que estos días pasen muy rápido, porque la verdad es que uno siempre, a pesar de tener confianza en el trabajo que he realizado, igual como se dice, ni una carrera está ganada hasta que se corre. Eso claramente me tiene ansioso y nervioso”
En comparación a lo que fue la primera elección, ¿cómo se siente ahora?
Bueno, me siento mucho más confiado. Obviamente que la vez anterior asumí la tarea solamente con la responsabilidad de sumar votos a la lista. No pensaba que podría ser electo, pero esta vez es completamente distinto, porque aquí está la responsabilidad de volver a ser electo. Eso para nosotros es una tarea, una tarea política. Por eso estuvimos trabajando fuertemente estos casi cuatro años. Uno para cambiarle la cara y la percepción que tiene la gente, la opinión que tiene la gente de la diputación. Y, por otro lado, porque esa es nuestra responsabilidad, estar en la calle, estar en terreno aparte de legislar y estar siempre pendiente de no perjudicar a la clase trabajadora y a nuestro pueblo, pero también estar en el terreno con ellos para no desconectarme, para estar todo el día retroalimentándome de su experiencia, de sus dificultades, sus demandas. Y creo que eso lo hemos hecho durante todo este tiempo. Por lo tanto, eso ya es completamente distinto a lo anterior. Estoy dedicado cien por ciento al trabajo con la gente, con las personas, con el pueblo. Eso hace que tengamos un poquito más de confianza con esta tarea política.
¿Siente que la mochila es un poquito más pesada?
Si la mochila es mucho más pesada, porque desde el momento en que asumimos ya esa mochila creció al mil con la responsabilidad que significa tener que estar en una posición como esa y porque también tenemos que cumplir con la expectativa de la gente. La gente cuando votó por mí o la que trabajó conmigo en todos estos años, es la que confió en que podía representarlos de buena manera en el Congreso, ante cualquier demanda, también en cualquier instancia. Y esa responsabilidad creo que es gigante. Si vuelvo a ser electo, creo que va a ser mucho mayor, porque significa que la gente creyó en mí y, por lo tanto, no puedo defraudar de ninguna forma.
¿Cómo ve el próximo desafío parlamentario, considerando el escenario político social que estamos viviendo?
Creo que va a ser un periodo especial. Tan especial como el que estamos viviendo. También dentro de la historia, de por lo menos desde el 90 hasta ahora, ha sido un momento especial. O sea, toparnos con este gobierno de Sebastián Piñera, este nefasto gobierno, toparnos con el estallido social, con la pandemia, ha sido ya un periodo especial. Pero el que viene ahora, con una Nueva Constitución, creo que va a ser trascendental para la historia de Chile. Va a ser el momento de derribar, de derrumbar la Constitución de Pinochet y creo que la reacción de la derecha, sobre todo la derecha fascista, va a hacer todo lo posible para que eso no suceda. Por lo tanto, en el Congreso se va a dar una gran batalla. Porque los dueños del poder, los dueños del dinero no van a querer entregar todo así tan fácilmente. Van a ser como lo han hecho hasta ahora, se van a resistir y quizá van a estar dispuestos quien sabe a qué cosa. Ya conocemos las experiencias internacionales: el asedio, el hostigamiento y para eso no tienen complejos.
¿Cree que los sectores de la izquierda van a tener una buena votación en estas elecciones?
Creo que sí van a tener buena votación. Siguiendo la experiencia de la última elección, en la municipal, en la convencional, donde la derecha se vio reducido a menos del tercio que buscaban junto a otros sectores más conservadores, como la Democracia Cristiana, con un puro convencional. La izquierda finalmente obtuvo más espacios en las municipales, en gobernadores y en las convencionales. Por lo tanto, espero que esa experiencia se repita en esta elección y que el Congreso tenga una mayoría parlamentaria de izquierda, que estén a favor de cambiar la Constitución y de aterrizarla de acuerdo con las necesidades del pueblo.
¿Se siente seguro para las elecciones del domingo?
No, no me siento seguro. La verdad es que estoy muy nervioso. Está todo abierto. Uno no sabe, a pesar de que lo dimos todo durante estos cuatro años. Creo que, como decía, las carreras no se ganan hasta que se corren, hasta que termina. Y la verdad es que sí tengo confianza, pero no creo que esté asegurado.
¿Cuál es el llamado a la ciudadanía, particularmente del distrito 9?
Bueno, el primer llamado es que vayan a votar. Creo que si logramos tener una importante participación es más probable que salgamos electos. Si la gente no va a votar, va a pasar lo mismo. Van a quedar los mismos de siempre, los que no queremos, tal vez muchos del rechazo. Por lo tanto, el primer llamado es que la gente convenza a su familia, a sus hijos, a sus nietos, sus sobrinos, a sus vecinos, a todas y todos los cercanos. Ojalá cada voto de apoyo que me han manifestado se pueda multiplicar por mil y es el llamado que tienen que hacer las mismas personas que nos están apoyando. Por otro lado, manifestar la importancia de este nuevo Congreso. O sea, tanta lucha, tantos presos políticos, tantas mutilaciones para lograr una nueva Constitución que puede salir muy buena después del plebiscito de salida. Pero si no hay un Congreso que quiera hacer carne esa Nueva Constitución y nuevas leyes, la verdad es que va a ser toda una lucha desperdiciada y en vano.