Como un paso fundamental para una transición energética justa, desde una matriz eléctrica basada en el carbón a una en renovables, calificó la directora de Chile Sustentable, Sara Larraín, el avance del proyecto de ley que “promueve el almacenamiento de energía eléctrica y la electromovilidad”.
La iniciativa, que se encuentra en segundo trámite constitucional, fue aprobada este miércoles 5 de octubre en particular y general por la Comisión de Minería y Energía del Senado, restando sólo que sea votada por el pleno, ya que en marzo de este año fue zanjada por la Cámara Baja.
Larraín, quien expuso la semana pasada ante la comisión, apuntó que la nueva ley permitirá guardar la energía limpia de fuentes renovables que hoy no se puede utilizar: “El almacenamiento es la opción más urgente para el sistema eléctrico nacional. Permite acelerar la descarbonización e ingresar las energías renovables al sistema eléctrico, terminar con el vertimiento de generación renovable, descongestionar las redes de transmisión”, señaló la experta, calificando el proyecto como “fundamental” para limpiar la matriz.
Además, explicó que permitiría “reducir las emisiones de CO2, cumplir los compromisos climáticos, reducir la contaminación local, cumplir con los planes de descontaminación y terminar con las zonas de sacrificio”. Esto, añadió, es fundamental, toda vez que un 78% de las emisiones de gases de efecto invernadero provienen del sector energía (generación, transporte, industria, edificación, etc.).
La directora de Chile Sustentable aseguró que, además, esta normativa sería un aporte para reducir la dependencia energética del país, dar seguridad al abastecimiento eléctrico y, más aún, “reducir en el mediano plazo los costos de energía para los hogares, la industria y reactivar la economía generando nuevos empleos limpios”.
Importancia del almacenamiento
La importancia del almacenamiento ya fue planteado en el estudio “Propuestas para el ingreso masivo de las ERNC a la matriz eléctrica en Chile: Análisis y propuestas regulatorias” del año 2021, desarrollado por KAS Ingeniería por mandato de Chile Sustentable. En éste se apuntaba a que se requería el “aumento de la eficiencia del uso del sistema de transmisión, sin necesidad de generar nuevas expansiones, mediante la instalación de almacenamiento y sistemas de control”.
Y, en el plano regulatorio, “definir la remuneración y reconocimiento de aporte a la potencia de suficiencia que se le debe pagar al almacenamiento y sistemas de control que se implementen, con independencia de si el sistema de almacenamiento se encuentra al interior de una instalación de generación o está integrado al sistema de transmisión o distribución”.
En este sentido, Sara Larraín recordó que según el estudio “Impacto Económico y laboral del retiro y/o reconversión de unidades a carbón en Chile”, financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo, el fomento de la industria de energías renovables en Chile permitiría crear unos 32 mil empleos al año 2030 y 40 mil al año 2050, y para avanzar en ello el almacenamiento es crucial, transformándose en un pilar de la recuperación económica post crisis pandémica. Algo en lo cual concordaron en la Comisión de Minería, donde expertos calificaron la nueva ley como una condición habilitante para el proceso de descarbonización.
La ecologista finalmente hizo un llamado a las y los senadores a aprobar este proyecto, por ser fundamental para avanzar en limpiar la matriz eléctrica nacional.
Ahora, en caso de que el pleno del Senado ratifique lo acordado por la Cámara de Diputadas y Diputados, el proyecto será despachado para su promulgación. Pero, de existir diferencias, las y los diputados deberán aprobar los cambios del Senado, pasando los artículos que se rechacen a una Comisión Mixta entre ambos estamentos legislativos.